Los jefes del sindicalismo más combativo y opositor al gobierno de Mauricio Macri salieron a rechazar de plano la posibilidad de que el bono de $5.000, a pagar dos cuotas entre dicimebre y febrero, acordado por la CGT y algunas cámaras empresarias pueda desactivar el conflicto social.
«Desde el Frente Sindical, con la CTA y los movimientos sociales anunciaremos una medida de fuerza», anticipó ayer Pablo Moyano, secretario general adjunto de Camioneros y virtual integrante del triuvirato combativo que lidera el Frente Sindical para el Modelo Nacional.
«Cuando se firmó hace dos años el bono de $2.000 nadie lo cobró», recordó el camionero dejando el manto de duda sobre el nuevo pacto al que llegó el martes la cúpula de la central obrera para compensar la pérdida del poder adquisitivo de los salarios.
«Es una maniobra más del Gobierno para dilatar un paro que tiene que ser ya» señaló Moyano, uno de los dirigentes más críticos de la cúpula cegetista y disparó: «La CGT volvió a fallarle a los trabajadores».
Además le dejó un mensaje al oficialismo que despliega un plan para blindar diciembre de desbordes de protestas: «Los que no acordamos con el Gobierno estaremos en la calle», concluyó en una entrevista con radio Cooperativa.