A pesar de los sucesivos tarifazos que las benefician y que ya se anunciaron también para este año, las empresas energéticas se niegan a efectuar la recomposición salarial pactada en la paritaria 2018. Por ello la la Asociación del Personal Superior de Empresas de Energía (APSEE) definió realizar un paro de actividades el 16 de enero.
La decisión se tomó en un encuentro que se llevó a cabo en el Salón Auditorio del gremio que integra la Corriente Federal de Trabajadores, donde por unanimidad se resolvió, además, continuar con la no realización de la extensión de la jornada laboral.
El secretario general de APSEE, Carlos Minucci, afirmó: “Los trabajadores tenemos vocación de diálogo, pero también de lucha, y bajo ningún concepto podemos aceptar que se nos cercenen los derechos”.
A su vez, recordó que desde el inicio de las negociaciones, el gremio intentó evitar tomar medidas drásticas, pero ante la falta de respuesta “por vía democrática y con el aval de todo el cuerpo de representantes, se llegó a esta decisión”, explicó el dirigente.
En esa línea, el reclamo de APSEE se enfoca no sólo en garantizar los derechos laborales de los trabajadores, sino también en la defensa del servicio público.
Al respecto, Minucci aseguró: “Sabemos que la energía eléctrica es un servicio fundamental y no queremos afectar al usuario, que es quien también está sufriendo la falta de inversiones de las empresas. Pero llegamos a un punto crítico que, en definitiva, también encubre un intento de flexibilización y disciplinamiento, que no vamos a permitir”.