La cúpula de la CGT Azopardo que comanda el camionero Hugo Moyano definirá esta tarde si realiza un nuevo paro nacional antes de fin de año contra el gobierno. Del cónclave sólo participarán dirigentes de esa central ya que invitaron a la CGT Azul y Blanca de Luis Barrionuevo que confirmó su ausencia.
Desde las 15, en el Salón Felipe Vallese de la central sindical de la calle Azopardo 802 de esta Capital, se reunirá el plenario de delegaciones regionales que deberá pronunciarse sobre la continuidad del plan de acción que el sindicalismo opositor acordó en enero pasado en Mar del Plata.
Desde la CGT Azopardo admitieron que «con Barrionuevo se mantiene la unidad en la acción, pero existen algunas desinteligencias» para tomar una decisión respecto de la modalidad con que ambos sectores le darían continuidad a las protestas.
El plan de Moyano es seguir extendiendo el período de tregua entre su central y el gobierno nacional porque considera que la imagen del gremialismo se desgastó con las declaraciones de Barrionuevo (alentando un estallido) y que una reiteración de paros los dejaría mal parados de cara a la sociedad.
Aunque en lo formal habrá un debate con las regionales, todo indica que se pospondrá, al menos, hasta dentro de un mes cualquier medida de acción que se pueda llegar a tomar desde la central.
Además de la presión de Barrionuevo, la CGT Azopardo sigue sin resolver si se sumará al paro del 20 de noviembre que fue convocado por la CTA Autónoma de Pablo Micheli y al que fue convocada.