La fabricante Cerámicas Cañuelas suspendió por más de un mes a todos sus trabajadores a la espera que, tras el verano, mejore la producción, repunten las ventas y puedan mantener el negocio.
La empresa radicada en el partido de Cañuelas tenía que retomar las tareas el 14 de enero tras haber tenido que parar la planta y darle vacaciones a toda la empresa por la falta de producción. No obstante, en esta ocasión tuvieron que extender el periodo de cese de actividades suspendiendo el trabajo de los 160 operarios de la planta de Levenne, indicó el Diario Sur.
«Estamos como podemos. El 22 de diciembre la empresa le dio a todo el personal junto las vacaciones debido a las bajas ventas y el stock acumulado. Ahora cuando volvimos nos tuvimos que juntar con los directivos porque la situación sigue crítica y entonces no se puede volver a producir», detalló Javier Clavero, delegado del Gremio de Ceramistas en Cañuelas a BAE Negocios.
«Tampoco hay expectativas que mejore después y es incierto el futuro de los 160 operarios», lamentó el dirigente gremial.
Las actividades van a estar suspendidas, por lo menos, hasta fines de marzo. Después, deberán rever la situación dado que hace varios meses se vieron afectados de lleno por la crisis en la construcción.
«Queremos volver a trabajar. Con las suspensiones perdemos el 20% del sueldo», explicó el representante de los trabajadores y culminó asegurando que «este modelo económico no nos favores a los trabajadores y a los comerciantes».