En la jornada de hoy, la gigante del rubro de las bebidas, Coca Cola – Femsa, se presentó formalmente en el Ministerio de Producción y Trabajo para hacer el pedido de Procedimiento Preventivo de Crisis y encendió las alarmas de todo el arco gremial que giro en torno al proceso productivo.
En el día de hoy se desarrolló una primera reunión con los funcionarios donde los representantes de Femsa expusieron la situación financiera de la empresa y justificaron el reclamo.
El viernes se realizará un nuevo encuentro para analizar cuáles son las alternativas existentes y el camino a seguir para paliar los problemas.
En su presentación ante Trabajo, FEMSA explicita que hay «una importante retracción del consumo» y que necesita «readecuar la fuerza de trabajo a los niveles actuales de producción».
El Procedimiento habilita a las grandes firmas a encarar suspensiones masivas y hasta despidos con reducción de las indemnizaciones. En la práctica también habilita a renegociar los eslabones productivos y las condiciones laborales.
En los últimos meses Coca Cola había comenzado con un plan de retiros voluntarios, despidos y vacaciones adelantadas que implementó en sus plantas de Gran Buenos Aires y Ciudad de Buenos Aires.