El Indec sistematizará la medición de las horas dedicadas al trabajo de cuidado no remunerado

El Gobierno oficializó la inclusión de la encuesta del uso del tiempo en la que trabaja el Instituto Nacional de Estadística y Censos, que se integra a la Encuesta Permanente de Hogares (EPH). Así se ratifica, a través del Boletín Oficial, la aprobación que dio el Congreso para el relevamiento que mide cuánto tiempo se dedica a las tareas de cuidado y cómo es ese «reparto» entre los géneros. La última medición del Indec data de 2013.

Ahora se establece que los datos deberán medirse cada dos años, es decir, le da continuidad, para poder evaluar el impacto de políticas.

En la Ciudad de Buenos Aires, según los datos de la Dirección de Estadística, publica una encuesta del uso del tiempo de forma regular, en 2016 las mujeres dedicaban 7.59 horas al trabajo remunerado de mercado y 3.27 horas al trabajo doméstico no pago. A eso se suman 5.27 horas dedicadas al cuidado de miembros del hogar, también sin remuneración. En el caso de los hombres, dedican 8.52 horas al trabajo de mercado y solo 1.57 al trabajo doméstico no pago, con 3.42 horas para el cuidado de familiares, sin pago.

La nueva encuesta nacional apunta a «recolectar y cuantificar con perspectiva de género información sobre la participación y el tiempo destinado por las personas» a sus diferentes actividades de la vida diaria, desagregado por género y edad.

El objetivo es medir el aporte económico del trabajo doméstico y de cuidado no remunerado fuera del mercado y al interior de los hogares, el tiempo de autocuidado, y generar información estadística para la cuenta satélite sobre el trabajo doméstico y el trabajo no pago. Los ejes en los que se centra la medición son el trabajo remunerado y el no remunerado, el cuidado de miembros del hogar, las tareas para otros hogares o la comunidad, la educación, la recreación, el autocuidado, los traslados y  la planificación y organización de tareas, entre otros. Las partidas presupuestarias, en tanto, provendrán de los fondos para la Encuesta Permanente de Hogares.

A partir de la información recolectada, la ley establece que se deberá identificar los factores de utilización diferencial del tiempo en razón del género y edad que profundizan la desigualdad económica, social y política entre mujeres y varones; desarrollar políticas públicas que promuevan una equitativa distribución del trabajo remunerado y no remunerado entre mujeres y varones; realizar campañas de concientización sobre el valor económico del trabajo doméstico y de cuidado no remunerado y recopilar en un informe final la información recolectada realizando un análisis comparativo de los resultados frente a encuestas previas y cualquier otro estudio relevante para la comprensión de la temática.

Por otra parte, también deberán publicar el informe final de la encuesta en sitios de acceso público y difundirlo entre organizaciones especializadas en el desarrollo de políticas públicas, instituciones académicas y organizaciones de la sociedad civil vinculadas a la defensa y promoción de los derechos de las amas de casa y de los demás sujetos comprendidos en la encuesta.