La comisión interna gremial aguarda la notificación de la cartera laboral «para conocer los detalles de la conciliación y resolver si la aceptamos o no», informó el delegado Esteban Simonetta a Télam.
«Queremos ver si la empresa retrotrae este conflicto, generado sólo por ellos, para que no haya más compañeros sancionados, porque sino lo hace no tiene sentido y el paro va a seguir», remarcó.
Los trabajadores iniciaron esta madrugada un paro por tiempo indeterminado en todos los ramales contra la decisión de la empresa de suspender a 25 choferes que participaron la semana pasada de una protesta gremial consistente en no cobrar el boleto a los pasajeros.
«Nos suspendieron a 25 compañeros por participar en el no cobro de boletos que hicimos la última semana en reclamo de una mejora en el servicio, y para no afectar a los pasajeros», explicó, por su parte, Néstor Marcolín, otro de los delegados gremiales.
Marcolín anticipó que «sólo levantaremos la huelga cuando la patronal levante las suspensiones de los trabajadores».
La medida de fuerza afecta no sólo a los 250.000 pasajeros que diariamente utilizan el servicio de los 19 ramales sino que ocasiona complicaciones al resto de los medios de transporte, tanto colectivos como trenes, que se desplazan de la zona norte del conurbano a la ciudad de Buenos Aires.
La sobrecarga del caudal de pasajeros se suma a las dificultades generadas por las intensas lluvias que afectan a la zona en los últimos días.