Un mano a mano de alto voltaje tuvieron en las últimas horas dos integrantes del moyanismo. Es que, al aire, Leonardo Fabré el líder de APOPS sindicato de ANSeS, y Marcelo Peretta, el secretario General de los Farmacéuticos y Bioquímicos, se cruzaron con el modelo sindical como principal eje de debate. Pero también por sus posturas respecto a la pandemia y a la cuarentena.
El asunto comenzó cuando Fabré lo acusó a Peretta de traicionar al movimiento obrero por haber apoyado la creación de un sindicato de jubilados y uno de policías.
«Apoyarse enfáticamente la creación de un ´Gremio de Jubilados’ (Prohibido por ley) y ahora de policías (Prohibido por ley) y estuviste en contra de una medida sanitaria de mi gremio para salvar la vida de trabajadores en el programa de un mercenario laboralista en Crónica. Defendás a los trabajadores organizados todavía?? Si tenes un proyecto político comprendería. Caso contrario lo tuyo va en contra del Movimiento Obrero y el Peronismo (dentro de la ley todo. Fuera de la ley nada)», rezaba el mensaje de WhatsApp que mandó Fabré y encendió el debate.
«La ley puede cambiarse. Consideras que los policías no son trabajadores? Crees que los jubilados están bien representados? Lo mío es a favor de los trabajadores y de la doctrina peronista que te recomiendo releer. La medida del gobierno es antisanitaria: colapsó la salud y empobreció la nación», respondió Peretta por privado.
«El mismo discurso de Cambiemos. Ahora comprendo. Disculpa la molestia», agitó el secretario General de APOPS reconocido por sus ya clásicas afichadas porteñas.
Pero lo más duro fue al aire. Mientras circulaban esos dardos por privado, por TV Peretta lo mandaba a trabajar. «Fabre está enojado con nosotros. Yo le quería decir, respetándolo en su carácter de secretario General, que él tiene que hacer un esfuerzo para que sus trabajadores vayan a trabajar. El miedo y el temor que tienen por el Covid lo tenemos todos y aún así hacemos el esfuerzo».
Y lo increpó: «Digale a su personal que haga el esfuerzo que hacemos el resto«. Y cerró: «Usted está en una agrupación que yo también pertenezco en la que están los camioneros. Ellos viajan por el país para llevar los alimentos y los medicamentos. En lugar de insultar y mandar bravuconadas, haga un esfuerzo por pedirle a su personal, que es esencial, que vaya a trabajar. Baje los decibeles y pongase a la altura de las circunstancias».