El juzgado del Trabajo Nº 70 ordenó hoy, a través de una cautelar, que el Sindicato de Obreros y Empleados de la Minoridad y Educación (SOEME) reincorpore a una empleada despedida en su puesto de trabajo. Especifica que eso debe hacerse con las tareas, en el horario y con la remuneración que detentaba antes de la cesantía.
Para la jueza Viridiana Diaz Eloy, el fallo se sustenta en «el perjuicio inminente e irreparable que podría sufrir la trabajadora ante la pérdida de su sustento económico en el contexto de emergencia actual».
La decisión implica que ahora Julio Simon (h), interventor designado por la Justicia del Trabajo hace algunos meses, tiene 5 días para cumplir con lo dictaminado bajo amenaza de sanciones. Se estipulan 2.500 pesos diarios por cada día de mora en el acatamiento.
La trabajadora en cuestión había sido despedida al inicio de la nueva intervención judicial en el gremio de minoridad. El argumento que había justificado la resolución es que habría impedido las labores del funcionario judicial. Algo que queda desestimado. Además, se puso de relieve su actividad sindical, por lo que se protegen especialmente sus derechos.
InfoGremiales trató de comunicarse con los encargados de prensa del sindicato pero no consiguió un descargo oficial por lo sucedido.
Vale recordar que el Sindicato de Obreros y Empleados de Minoridad y Educación tiene 24 mil afiliados en todo el país, pero el núcleo de su fuerza está en la Provincia de Buenos Aires.