En los primeros siete meses del año el empleo registrado se redujo en 385.200 personas: 236.700 de esos puestos se perdieron durante la pandemia, entre abril y julio.
Con respecto a julio de 2019, la pérdida de empleos formales afectó a 337.200 trabajadores.
El informe oficial advierte que, en medio de la pandemia, en el sector de hoteles y restaurantes «se observa un proceso de destrucción de empleo que no aminora su ritmo».
La mejora mensual se produjo por mayores aportes de monotributistas y autónomos, asalariados privados y personal doméstico registrado.
Esto permitió que el empleo formal o «en blanco» aumente en 53.700 personas, mientras se redujo en 12.300 la cantidad de trabajadores del sector público.
Con estas cifras, el empleo formal mejoró en 41.400 personas con relación a junio, por la mejora de la flexibilización parcial de las medidas de cuarentena.
En julio los empleos con aportes al sistema de Seguridad Social sumaron 11.773.300, mientras en junio totalizaron 11.731.900.
El crecimiento del empleo en julio fue liderado por la recuperación del monotributo, que aumentó 2,6% y el régimen de autónomos (+0,6%), mientras el monotributo social subió apenas 0,1%.
Se registraron aumentos en el sector de la Pesca (+0,9%), actividades inmobiliarias, empresariales y de alquiler (+0,5%), servicios sociales y de salud (+0,3%), enseñanza (+0,2%) e industrias manufactureras (+0,2%).
En lo que respecta a actividades inmobiliarias, empresariales y de alquiler, y de la industria manufacturera, se trata del segundo mes consecutivo en el que presentan una variación positiva tras la fuerte caída de abril.
El empleo bajó en hoteles y restaurantes (-1,8%), construcción (-1,5%), explotación de minas y canteras (-1,3%), servicios comunitarios, sociales y personales (-0,7%) e intermediación financiera (-0,2%).
A nivel provincial, hubo mejoras en Tierra del Fuego (+1,3%), San Luis (+0,7%), Jujuy (+0,6%), San Juan (+0,5%), Chaco (+0,3%), Corrientes (+0,2%), La Rioja (+0,2%) y Santa Fe (+0,2%), mientras Misiones se mantuvo sin variación.
Las mayores caídas se registraron en Neuquén (-2,2%), Santiago del Estero (-1,1%), Salta (-0,9%), Mendoza (-0,7%), Tucumán (-0,5%), Formosa (-0,4%) y Rio Negro (-0,2%).
El reporte oficial sostiene que existe un proceso de «estabilización del empleo», dejando atrás las pronunciadas caídas observadas en los primeros meses de la pandemia.