Pablo Moyano, Hugo Yasky, Ricardo Peidro, Daniel Yofra y Roberto Baradel, más decenas de gremialistas, firmaron la Proclama 9 de Julio. Piden que el Estado cumpla un rol central en la economía, que se fortalezca el mercado interno y reclaman «una inmediata y sustantiva distribución del ingreso y la riqueza».
Con el aval de cientos de dirigentes políticos, sociales y gremiales y de distintas personalidades, se publicó la Proclama 9 de Julio. El documento, presenta una propuesta para la salida de la crisis económica de Argentina y hace eje en la distribución de la riqueza.
Pablo Moyano, Hugo Yasky, Ricardo Peidro, Daniel Yofra, Roberto Baradel, Walter Correa, Sonia Alesso, Hugo Godoy y Raúl Durdos, entre las decenas de firmas de dirigentes sindicales, apoyan el escrito que propone abandonar las políticas de ajuste del FMI que fracasaron y promueve el crecimiento y la distribución de la riqueza.
Entre los ejes centrales de la Proclama, se reclama que el Estado cumpla «un rol central, interviniendo, regulando, supervisando, orientando, planificando, generando incentivos y oportunidades para los sectores claves de la economía, produciendo bienes y servicios que favorezcan la integración social y territorial de la Argentina».
«El trabajo y la producción deben organizarse, conforme a las exigencias del desarrollo económico y social de la Nación», agregan.
Además insiste en la «reactivación del mercado interno» y en «el estímulo de la demanda efectiva con el imprescindible aumento de salarios e ingresos de la población».
En lo que es la definición más tajante, la proclama sostiene la «necesidad de una inmediata y sustantiva distribución del ingreso y la riqueza, que no sólo es un imperativo de justicia social, sino una condición necesaria del desarrollo económico autónomo».
También hablan de «diversificar la estructura productiva y dar valor a las exportaciones» y de dar un lugar central a «la inversión, tanto pública como privada».