En lo que será una de las últimas medidas de fuerza que encabece antes de dejar la conducción del gremio, el líder petrolero Guillermo Pereyra lanzó una huelga de 24 horas en Vaca Muerta. Reclama más personal en las dotaciones de trabajo. La «adenda Vaca Muerta» en cuestión.
El mayor sindicato petrolero de Argentina convocó a una huelga de actividades por 24 horas en reclamo de un cuarto hombre en las dotaciones de los equipos de perforación y workover, y el refuerzo de las dotaciones en los equipos de fractura.
La medida de fuerza, que podría ser de las últimas antes de que Guillermo Pereyra deje la conducción del sindicato, podría afectar la actividad en Vaca Muerta, una de las mayores reservas de hidrocarburos no convencionales del mundo.
«Cuando se firmó la adenda eran 13 compañeros para hacer entre 3 y 4 fracturas diarias. Hoy son 12 y las dotaciones se mantienen, lo quiere decir que hay una mayor carga de trabajo para los compañeros. Estamos pidiendo de elevar a 3 más en lo que hace a la fractura», dijo Pereyra.
El Sindicato de Petróleo y Gas Privado de las provincias de Río Negro, Neuquén y La Pampa representa a unos 24.000 trabajadores, muchos de ellos en la formación de Vaca Muerta.
Se estima que la formación de Vaca Muerta es la cuarta reserva mundial de petróleo de esquisto y la segunda de gas no convencional.
Justamente para avanzar en atraer inversiones a esa reserva es que firmó, en la gestión Cambiemos, la «adenda Vaca Muerta», hoy en el ojo de la tormenta.
La relación con Macri y haber firmado esa adenda al convenio colectivo de trabajo marcó buena parte del cierre de la carrera gremial de Pereyra que ya anunció que en octubre, y luego de 39 años consecutivos, dará un paso al costado.