Antonio Caló, líder de la UOM, criticó a los formadores de precios por no plegarse a un acuerdo. Aseguró que «era necesario» y confirmó que van a «acompañar todo lo que haga que el trabajador tenga mayor poder adquisitivo».
El titular de la UOM, Antonio Caló se mostró crítico con las empresas que se negaron a congelar los precios voluntariamente: «Creo que era necesario. El Gobierno llamó a los empresarios para ver si se podían poner de acuerdo en los precios. No lo entendieron así los formadores de precios y bueno, hubo que poner el control de precios. Esperemos dé resultado», aseguró.
«Y si no da resultado, ‘el camino se hace al andar’, dijo Marechal. Veremos cómo anda este control de precios y si los empresarios formadores de precios entienden hay que levantar el control de precios y se acomodan los precios por sus propios medios, bienvenido sea», añadió.
«Nosotros vamos a acompañar todo lo que haga que el trabajador tenga mayor poder adquisitivo», agregó el metalúrgico desde la sede de la Confederación General Económica (CGE) a la que asistió para acompañar el reclamo de las pymes para que la política de estímulo del consumo no se traduzca en un beneficio exclusivo para las alimenticias.
«Hoy estoy acá para acompañar el planteo de los empresarios pyme. Queremos que los metalúrgicos puedan consumir metalurgia y que todos los trabajadores mejoren su capacidad de consumo», enfatizó Antonio Caló, dirigente de la UOM y la CGT, quien se sentó a la izquierda de Kulfas durante el encuentro tripartito.
En representación de la CGT también estuvieron presentes el secretario general, Héctor Dáer, y el titular de la Unión Obrera Textil, Hugo Benítez.