El Consejo Directivo de la CGT reivindicó hoy las gestiones que realiza el Gobierno nacional ante el G-20 para alcanzar «plazos y tasas justas que permitan resolver los condicionamientos externos que postergan el desarrollo», y pidió a los empresarios que «asuman su responsabilidad».
Un documento de la conducción nacional de la central obrera, que el 11 de noviembre próximo renovará autoridades, sostuvo que «los empresarios deben asumir su responsabilidad y no esconderse detrás de la inasible cadena de producción».
«El empobrecimiento generalizado de los asalariados por los efectos inflacionarios, que desgarra el poder de compra de los trabajadores ocupados, desempleados y jubilados es indisimulable, y sus consecuencias sobre el consumo y el mercado interno alcanzaron límites impensados. Los empresarios deben asumir su responsabilidad», sostuvo el documento.
Al referirse al rol de esos empresarios, la CGT sostuvo que pareciera que «siempre la culpa la tienen los otros, pero los aumentos de precios los pagan los trabajadores».
La central obrera, que colideran Héctor Daer y Carlos Acuña, respaldó las gestiones que realiza el Gobierno nacional ante el G-20 a través del presidente Alberto Fernández, y reclamó al Ejecutivo que garantice que esos empresarios cumplan sus obligaciones.
«A cuatro años de destrucción del aparato productivo, de fiesta para la especulación financiera y de endeudamiento externo sin precedentes, se sumaron dos años de pandemia de coronavirus, lo que degradó el tejido social de una forma tal que hoy resulta imposible reconocer a la Argentina detrás de tanta desigualdad», subrayó.
La CGT respaldó de forma decidida «la firme posición del presidente ante el G-20 al no permitir sumar nuevos impedimentos o postergaciones a la reparación del tejido social», y exhortó a los actores socio-políticos a acompañar todas las demandas populares.
Para la central obrera, los acuerdos deben alcanzarse sobre la base de tener presente «las consecuencias sociales provocadas por el irresponsable endeudamiento externo».
«La CGT confía en que los líderes del mundo, conscientes de las desigualdades sociales que la pandemia desnudó, acompañarán la solicitud argentina», concluyó.