A través de un comunicado de prensa titulado «No adherimos. Queremos Justicia», la seccional Nº 2 de la Capital Federal de la Unión de Empleados de la Justicia de la Nación (UEJN) expresó su rechazo a la convocatoria para el 18 de febrero y cuestionó en durísimos términos al titular del gremio a nivel nacional, Julio Piumato.
En las últimas horas, trascendió que el moyanista será el responsable de la «logística» y el «cotillón» para la movilización que irá del Congreso a la UFI-AMIA, frente a Plaza de Mayo. «Vos estuviste ahí, contra el ajuste y el avasallamiento a la justicia, el #18F tenés que estar defiendo y exigiendo una justicia independiente», dicen los afiches de Piumato.
«Lamentamos que se use la muerte de un miembro del Poder Judicial para esconder tras ella intenciones políticas que tienen como objetivo atacar al Gobierno nacional. Llamamos a los funcionarios judiciales a abocarse al caso que debe esclarecerse, y que mantiene en vilo al pueblo argentino, en vez de especular y ser parte de operaciones políticas desagradables y desestabilizadoras», sostuvieron los judiciales porteños.
Desde que radicalizó su postura anti-kirchnerista, Piumato acumula objeciones internas, dado que se postura política de oposición cerrada suele mezclarse con su actividad gremial.
«Es una marcha política, cosa que no criticamos, pero queremos que blanqueen al pueblo las verdaderas intenciones oscuras y no las enmascaren de retórica republicana y demagogia democrática», desafiaron.
El secretario general adjunto de la seccional Nº 2 y principal referente de la «Agrupación 16 de Noviembre», Juan Manuel Rotta, sostuvo que «el problema no es la condición política de la marcha, sino su ocultamiento en base a las mentiras de siempre».
«Nunca marcharíamos para pedir justicia junto con quienes hicieron de la justicia una red de impunidad inmensa», agregó el dirigente sindical.
En esa línea, los gremialistas de UEJN repudiaron en el comunicado el accionar de «parte del Poder Judicial y dirigentes gremiales y políticos» que «se prestan a tan tamaño descaro, algunos inclusive, abandonando para siempre banderas populares que solían defender».
En el parte de prensa, aclararon además que «se puede estar a favor o militar para el Gobierno, también se puede estar en contra y militar también; esas son las reglas», pero remarcaron que «lo que no se puede es estar a favor de Corporaciones Judiciales enemigas del pueblo, de dirigentes políticos que defienden ideas conservadoras y antipopulares fomentados y respaldados por medios de comunicación que fueron son y serán enemigos del pueblo».
«Por eso: No adherimos, no nos prestamos a ser serviles a ningún poder que vaya en contra de los intereses del pueblo. No seremos blanco de maniobras políticas encubiertas … no nos traicionamos», concluyeron.
La agrupación de Rotta derrotó en las últimas elecciones de mayo pasado a la lista Marrón de Piumato en alianza con la «Quique de Pedro» de Vanesa Siley. De 1244 empadronados en los comicios de la seccional Nº 2, se presentaron a votar 1015. La lista Azul y Blanca de Siley y Rotta se impuso por el 87,2 % de los votos (872), contra el 12,8% (129) de la nómina del ladero del camionero.
A la movilización ya confirmaron su participación la CGT de Moyano y la encabezada por Luis Barrionuevo. Por su parte el ceteista Pablo Micheli, todavía no se sumó y se mostró más bien reacio, mientras que Hugo Yasly desistió de adherir y marchar.