El economista ultraliberal, José Luis Espert, difundió su peculiar plataforma electoral y desplegó su plan para el mercado de trabajo. Flexibilización laboral, eliminación del derecho a huelga para estatales y limitación del derecha a huelga para sector privado. Además, eliminación de las indemnizaciones, polifuncionalidad y prisión para sindicalistas, entre otro paquete de medidas.
Avanza Libertad, el frente electoral bonaerense que tiene como candidato a diputado nacional al economista ultraliberal José Luis Espert, difundió su plataforma electoral en la que se le destina un apartado específico al mercado de trabajo.
Entre las propuestas que se encuentran, aparece la idea de eliminar o limitar el derecho a huelga, flexibilizar las condiciones de trabajo, eliminar las indemnizaciones, promover la polifuncionalidad y hasta llevar a prisión a los dirigentes sindicales.
Según Espert «El tema laboral en Argentina involucra cambiar una legislación obsoleta» pero describe lo que, entiende, es «un problema anterior» y «es el comportamiento del movimiento sindical que, amparado por las leyes vigentes y por costumbres antirrepublicanas asumidas como normales, abusa de una participación pública con fines políticos extorsivos, procurando resolver en las calles lo que se debería dirimir en el Congreso».
Para ello, el economista promueve la «tolerancia cero con la extorsión política de los dirigentes sindicales y piqueteros» y habla de la «eliminación de la capacidad de extorsión del aparato sindical a través de las huelgas generales y de la ocupación de los espacios públicos. Esta anomalía también se aplica al comportamiento de los representantes de los trabajadores informales y los desempleados».
Entre los «cambios» que destaca como fundamentales se encuentra «Limitar el derecho de huelga en cualquier actividad, previendo etapas previas de conciliación», y agrega que «la ley preverá la inhabilitación y multa para los dirigentes sindicales que violen las instancias legales con huelgas salvajes u otros medios extorsivos». Además asegura que «los días de huelgas no serán pagos».
También habla de «Limitar a un mínimo excepcional la legalidad de las huelgas generales» y de condenas de multa, inhabilitación y prisión para los dirigentes sindicales que las convoquen.
Respecto de los empleados públicos es todavía más taxativo: «Los empleados estatales y de servicios esenciales privatizados, no tendrán derecho a la huelga».
Sobre la legislación laboral, Avanza Libertad propone la modificación de cuatro leyes: Ley 14.250 de Convenciones Colectivas de Trabajo (1953), Ley 18.610 de Obras Sociales (1970), Ley 20.744 de Contrato de Trabajo (1974) y Ley 23.551 de Asociaciones Sindicales (1988).
Y sigue: «Se eliminará el régimen de indemnizaciones sin justa causa y se lo reemplazará por un seguro de desempleo» y se avanzará en la flexibilización laboral compulsiva: «Se flexibilizarán los plazos y modos de contratación; se reconocerá el carácter multifuncional, multiprofesional y polivalente de las tareas; se permitirá una movilidad funcional y de localización; se incorporará el trabajo a distancia y desde el hogar; se permitirán esquemas de remuneración flexible basados en productividad y en beneficios».
Por último habla de eliminar el unicato sindical y promover las negociaciones salariales y de condiciones laborales a nivel de empresa.