El flamante secretario de Políticas Económicas y Sociales de la CGT Omar Plaini resaltó la importancia de la unidad, la renovación de dirigentes, el avance en materia de género aunque consideró que falta más y valoró la existencia de un programa, hecho que no se daba hace unos 40 años.
El dirigente canillita es de los ingresantes por el moyanismo al Consejo Directivo de la CGT y uno de los que impulsó desde las negociaciones del año pasado la necesidad de un programa como forma de garantizar la reunificación.
«El nuevo Triunvirato viene de una aspiración que ya lleva muchos años. Nos venían reclamando desde abajo los trabajadores y las trabajadoras: la unidad, que no se daba por diferencias entre las distintas corrientes. Finalmente lo logramos.», dijo aliviado luego de una jornada de mucha tensión e incertidumbre.
«Además con una gran renovación de dirigentes, un avance de género, aún hay que avanzar más y también, por primera vez en décadas, creo que después de 40 años tenemos un programa.» Plaini refiere al documento final que presentó ayer la nueva CGT: «Hemos elaborado un plan de acción para una Argentina de todos y todas y hemos hecho centro en seis ejes principales. Allí hacemos una descripción de la realidad y también propuestas.»
«La CGT empieza a recomponer su imagen frente a la sociedad que hacía muchísima falta y con una participación casi total de las organizaciones sindicales, alrededor de 200 que componemos la central dimos este salto cualitativo y cuantitativo.», aseguró.
Respecto al congreso extraordinario que permitió la modificación del estatuo, Plaini aseguró que las trabas para el avance en materia de género está en todos lados. «Es una sociedad machista que estamos superando. El ejemplo de ayer de la CGT es para tener en cuenta. No es el ideal pero es el posible hoy y sería importante que ahora lo dieran las cámaras empresariales, los gobiernos nacionales, provinciales, municipales, la iglesia.», comparó.
Ahora bien, Plaini aseguró que el problema no es la CGT sino las organizaciones de base: «A la hora de mandar sus representaciones mandan hombres, los secretarios generales o alguno de la comisión directiva. Bueno, ahora están obligados, salvo los tres cargos máximos que tienen firma, los demás están obligados a que sea un binomio. Eso sí, cuando se vota, vota uno, el hombre o la mujer. Y a partir de ahora estamos obligados por estatuto a que cada decisión que tome la CGT esté presente un 30% del género. Son pasos que se dieron adelante.», rescató.
Respecto a la movilización prevista para el Día de la Militancia, que será el próximo 17 de noviembre, y al ser consultado por la autonomía de la central, Plaini afirmó: «La CGT fue muy clara ayer de nuestra autonomía. Más allá de que los actores que estamos allí hemos acompañado a nuestra coalición durante y post la campaña electoral. De allí a que la central no tenga autonomía hay una gran distancia. El movimiento sindical tiene que tener autonomía. Después veremos en nuestra primera reunión a ver cuál será la acción que vamos a tomar.», aseveró.