Tras el fracaso de las negociaciones, La Bancaria y las cámaras que nuclean a las entidades financieras se verán las caras este mediodía. Podrían resolver la primera paritaria importante que marcará las expectativas salariales de 2022.
La flamante conducción nacional de la Asociación Bancaria (AB), que lidera Sergio Palazzo, decidió ayer el estado de alerta y movilización del gremio ante «la intransigencia paritaria patronal», y sostuvo que las cámaras «no presentaron una propuesta que satisfaga las necesidades salariales».
Palazzo y el secretario de Prensa, Claudio Bustelo, señalaron en un comunicado que la audiencia realizada ayer en el Ministerio de Trabajo debió pasar a un cuarto intermedio hasta las 13.30 de hoy ante «la intransigencia de los empresarios».
«Las cámaras no presentaron una propuesta que satisfaga las necesidades salariales, que deben ser acordes a la realidad del costo de la canasta alimentaria. Esa actitud es una dilación más a la que los trabajadores están acostumbrados, porque no reconocen su esfuerzo durante al año, agravado por la Covid-19», aseguraron.
Palazzo y Bustelo remarcaron, en representación del Secretariado Nacional, que la ausencia de acuerdo determinó la declaración del estado de alerta y movilización.
Se trata de un conflicto que es especialmente seguido de cerca por todos los actores del mercado laboral. Sindicatos, empleadores y el propio Gobierno Nacional.
La paritaria de La Bancaria será la primera peso pesado en cerrar un acuerdo para el año próximo y empezará a marcar las expectativas salariales de los gremios del universo cegetista para el 2022.