El gobernador bonaerense Axel Kicillof anunció hoy que se pagará un bono de fin de año de 20 mil pesos a los trabajadores y trabajadoras de la administración pública provincial, luego de una reunión que mantuvo esta tarde con dirigentes gremiales del sector.
«El objetivo de esta medida es aprovechar la mejora que se observa en la recaudación para distribuir los resultados del crecimiento económico con todos los trabajadores», sostuvo Kicillof y agregó: «Esto es posible gracias a que al término de este año ya estaremos recuperando lo perdido durante la pandemia, que es una situación excepcional».
El bono extraordinario es un monto no remunerativo que se aplicará en diciembre por única vez, en beneficio de los y las trabajadoras activas del Estado, incluyendo la Administración Pública Provincial, docentes, personal de la policía y servicio penitenciario y de carrera hospitalaria, entre otros.
«Nuestro programa es ir recuperando en la medida de lo posible todo lo que se deterioró el ingreso durante los cuatro años anteriores; nos comprometimos a que los salarios le ganen a la inflación y, con el cierre de la paritaria en un promedio del 54%, este año se estarían recuperando más de cuatro puntos de salario real», argumentó.
Kicillof concretó este anuncio durante una reunión con representantes de los gremios que nuclean a los agentes estatales, junto a los ministros de Hacienda, Pablo López y de Trabajo, Mara Ruiz Malec.
López consideró que «el balance de estos dos años es muy positivo en términos de los objetivos planteados para mejorar las condiciones de trabajo y el poder adquisitivo de los trabajadores».
Por su parte, Ruiz Malec aseguró que «después de una etapa en la que se perdió un 25% de salario real, se inició un período de recuperación aún en un contexto muy difícil para todos».
«Tras cerrar la paritaria, este bono busca aliviar los bolsillos y reconocer el inmenso esfuerzo realizado por todos y todas las trabajadoras en estos dos años de pandemia», declaró.
Estuvieron presentes los secretarios generales provinciales de ATE, Oscar de Isasi; y de UPCN, Carlos Quintana; los titulares del Sindicato Unificado de Trabajadores de la Educación, Roberto Baradel; de la Unión de Docentes de la Provincia de Buenos Aires (UDOCBA), Alejandro Salcedo; de la Asociación del Personal de los Organismos de Control (APOC), Pedro Fernández; del Sindicato de Salud Pública (SSP), Miguel Ángel Zubieta; y de la Federación de Educadores Bonaerenses (FEB), Mirta Petrocini.
También, del Sindicato Argentino de Docentes Privados (SADOP), María Inés Busso; de la Unión de Docentes Argentinos (UDA), Edith Contreras; de ATE Ensenada, Francisco Banegas; de la Asociación Sindical de Profesionales de la Salud de la Provincia (CICOP), Pablo Maciel; de la Asociación Judicial Bonaerense (AJB), Pablo Abramovich; y de la Asociación de Empleados de Casinos Nacionales (AECN), Marcos Labrador.
Fueron de la partida, además, la Asociación Gremial de Administración, Maestranza y Servicios de Casinos (AMS), Anibal Settino; el secretario de Capacitación y de Médicos de Reciente Graduación de AMRA, Jorge Ouviña; el secretario adjunto de la Asociación del Magisterio de Enseñanza Técnica (AMET), Ariel Guede; y el interventor del Sindicato de Obreros de la Minoridad y Educación (SOEME), Julio César Simón.
Al finalizar el encuentro, Baradel afirmó que los gremios están «orgullosos» de los trabajadores de «todas las áreas del Estado por el inmenso esfuerzo que hicieron durante la pandemia».
«Después de una época en la que los docentes estábamos acostumbrados a otro tipo de negociaciones, hoy hay vocación por reconocer a todos los trabajadores del Estado, lo cual es inédito y valorado por todos», subrayó a su vez Petrocini.
«Vemos una inversión decidida en términos de educación y salud, que se sigue manteniendo más allá de la pandemia y tenemos la esperanza de que el 2022 sea un año para seguir reparando derechos», manifestó de Isasi.
Además de la recomposición salarial, hubo avances en materia de calidad de las condiciones de trabajo: en estos dos años se incorporaron a planta 3.700 contratos de emergencia, 1.900 becarios y 1.137 profesionales de la salud; se eliminaron sumas no remunerativas en 13 mil agentes y se amplió el régimen de licencias por maternidad, paternidad, adopción, atención de un familiar enfermo y fallecimiento.
«Este es un reconocimiento a las y los trabajadores estatales por el esfuerzo que han realizado durante la pandemia después de cuatro años muy difíciles por el deterioro de los ingresos», señaló Kicillof y concluyó: «Presentamos un programa de seis años de recuperación que incluye, además de planes de infraestructura y trabajo, la reconstrucción del Estado provincial».