Los representantes de las organizaciones gremiales de taxistas se reunieron el viernes para «evaluar la ofensiva contra la actividad» en la ciudad de Buenos Aires, por lo que exigen una reunión con el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri.
Según denunciaron, las empresas monopólicas extranjeras «intentan instalarse violando leyes y disposiciones vigentes con el uso de aplicaciones por Internet» que buscan la «desaparición de decenas de empresas de Radio Taxi».
Además, apuntaron contra el Gobierno porteño por «cercenar espacios» y «achicar» el tránsito en avenidas, como es el caso de la implementación de la bicisenda, o el plan de instalar coches eléctricos de alquiler en el macrocentro.
También denunciaron un «apadrinamiento a las combis que trasladan pasajeros» que, aseguraron, «muchas de ellas están sin autorización ni regulación».
Como consecuencia, declararon el estado de «alerta y movilización» y exigieron una «urgente» reunión con Macri para «producir un cambio inmediato de la política de transporte» que afecta la actividad.
Al margen, sino hay contratiempos, el gobierno porteño podrá llevar el valor de la ficha de taxis de $1,43 a $1,69 lo que implicará una suba de 18,18 %. La Bajada de bandera pasará de $14,30 a $16,90. En mayo comenzaría a regir las nuevas tarifas.