El Consejo del Salario Mínimo Vital y Móvil acordó un aumento del 45% en cuatro cuotas que se aprobó por unanimidad con la excepción de la CTA Autónoma que se abstuvo. La central dio a conocer los motivos para mantenerse al margen del acuerdo que llevará el salario mínimo a $47.850 en diciembre de 2022. «De ningún modo atiende la pérdida en el salario real», aseguró.
Este miércoles se realizó la reunión del Consejo del Salario Mínimo, Vital y Móvil. Con la abstención de la CTAA, se aprobó un aumento total del 45% anual en 4 cuotas: 18% en abril, 10% en junio, 10% en agosto y 7% en diciembre. Asimismo se acordó una nueva revisión en agosto. Con estos porcentajes, el salario llegará en diciembre a $47.850.
«A través de su abstención en el voto, la CTA Autónoma mostró la disconformidad de un aumento que de ningún modo atiende la pérdida en el salario real del 23.5% durante el Gobierno de Macri y el 15.5% durante esta administración; ni prevé el escenario de inflación proyectado para este año, que en un panorama optimista estará entre el 50 y el 55%.», expresaron.
Durante la reunión, la central planteó su posición de reclamar un aumento del 53% con revisión en septiembre, la inclusión de los sectores que no son alcanzados por el SMVyM (trabajadoras y trabajadores públicos provinciales y municipales; de casas particulares, del sector rural y de cuidados comunitarios), y la fijación de una Canasta Familiar Básica de referencia.
Asimismo, la central -representada por su Secretario General, Ricardo Peidro-, remarcó sobre la importancia de que el Gobierno pueda ponerle un freno a los grupos económicos y formadores de precio: «sino cada aumento que consigamos aquí o en las paritarias sectoriales se licuan con la inflación», dijo Peidro.
Finalmente se solicitó el reconocimiento del trabajo de cuidados, realizado fundamentalmente por mujeres: «para que el salario tenga una concepción de abarcar a todos los trabajadores y trabajadoras, camino a discutir un salario universal a futuro».