El paro nacional de La Fraternidad se mantuvo por unas horas a todo el país sin servicio de trenes. La medida de fuerza, en reclamo de que se reestablezca el servicio Buenos Aires – Bahía Blanca, sirvió como demostración de poder de Omar Maturano, dirigente que en un semana relanzará su propia confederación de gremios del transporte para competir con Sergio Sasia y el moyanismo.
El gremio ferroviario de La Fraternidad, que comanda Omar Maturano, inició desde la medianoche un paro de actividades por 24 horas que mantuvo paralizado los servicios de trenes de cargas y de pasajeros en todo el país hasta hace instantes.
De hecho, esta mañana se registraban en las principales estaciones de trenes del Gran Buenos Aires largas filas en las paradas de los colectivos por parte de los usuarios habituales del servicio ferroviario que intentaba llegar por ese medio de transporte a sus lugares de trabajo.
La acción de protesta había sido dispuesta el 21 de este mes por el Secretariado Nacional del gremio, por sus características no pudo ser conciliada por el Ministerio de Trabajo y fue ratificada anoche por el propio Maturano para todas las formaciones de pasajeros y cargas. Son 100 los ferroviarios afectados.
«La Fraternidad no duda en defender a la industria ferroviaria y los puestos de trabajo, vulnerados por la decisión judicial de suspender los servicios entre Buenos Aires y Bahía Blanca por un descarrilamiento. La organización sindical también ratifica el estado de alerta y movilización», enfatizó el dirigente, quien adelantó que continuarán los paros y el quite de colaboración en la actividad.
Esta mañana el propio Maturano en declaraciones radiales aseguró que «si el ministro de Transporte nos da una solución, levantamos el paro de trenes». El mensaje ya se sintió claro. Más tarde levantó la medida de fuerza.
La huelga le sirvió a Maturano, adicionalmente, como una demostración de poder y una plataforma de lanzamiento de lo que será en una semana la Unión General de Asociaciones de Trabajadores del Transporte (UGATT).
La UGATT es un sello que está en desuso hace 6 años y que en el pasado supo ser la pata de transporte de la ya extinta CGT Alsina, en tiempos en los que gobernaba Cristina Fernández.
Ahora la UGATT será retomada por el tridente que conforman Maturano – Roberto Fernández – Luis Barrionuevo que reagruparán a sus tropas para lanzarse a competir por el control de los gremios del sector con la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (CATT) que lidera Sergio Sasia en sociedad con el moyanismo.
Entre las organizaciones que ya confirmaron que integrarán la UGATT se encuentran: Unión Tranviarios Automotor (UTA); La Fraternidad; Unión Carga y Descarga; Unión Trabajadores Ferroviarios (UTF); Unión Personal Superior Ferroviario (UPSF); Sindicato Estaciones de Servicio y Garajes (Soesgype); APDFA; Señaleros ferroviarios; sindicato de Remiseros: Sindicato de Conductores de taxis. También estarán presentes gremios de la aviación como fluviales y marítimos
Según pudo saber InfoGremiales, se espera en su relanzamiento la presencia de viejos popes sindicales, que hoy están tras bambalinas o en proceso de regreso. Entre ellos se nombra al ex mandamás de los marítimos Omar «Caballo» Suarez. También se menciona a referentes de la actividad aeronáutica que por el momento mantuvieron un perfil subterráneo.
Adicionalmente, dejaron trascender que el plan es aún más ambicioso. Es que también promoverán a sus propios candidatos para competir por el control de los gremios que integran la CATT. Un espaldarazo político, gremial y de logística para sostener dirigentes que puedan disputar mano a mano las elecciones que se vienen en la actividad.