Tras el anuncio para los jubilados, en el Gobierno descartaron ayer, definitivamente, la chance de un bono generalizado para trabajadores. La idea no tuvo acompañamiento desde los gremios. Preparan herramientas, que presentarán hoy ante la UIA y la CGT, para jugarse todo en el marco de las paritarias.
Tras el anuncio de ayer de Alberto Fernández del pago de un bono de 6.000 pesos para 4,6 millones de jubiladas, jubilados y pensionados, en el Gobierno Nacional descartaron la utilización de la misma herramienta para trabajadores activos.
«No existirá un bono», le dijeron altas fuentes del Ejecutivo a InfoGremiales. «Al menos no es algo contemplado, en principio, para los primeros meses del año», agregaron.
La idea de un bono generalizado para trabajadores registrados públicos y privados se había barajado la semana pasada en el entorno presidencial. De hecho se puso sobre la mesa en los encuentros informales con los dirigentes sindicales y las cámaras empresarias.
Sin embargo la posibilidad no terminó de germinar, entre otras cosas, porque no encontró acompañamiento en el sector sindical. Los sindicalistas lo ven como un parche que no ataca el problema de fondo.
El propio Hugo Moyano sentenció: «El salario se defiende con las discusiones paritarias y el Gobierno está ofreciendo esa posibilidad».
Adicionalmente señalan que, en ante esas medidas excepcionales, suele haber alto grado de incumplimiento de los empleadores, lo que termina relativizando su impacto.
Por ello, ahora, la apuesta en la que pusieron a trabajar al ministro de Trabajo, Claudio Moroni, es a encontrar «mecanismos que puedan fortalecer la recomposición de los ingresos» de los asalariados en el marco de las paritarias.
«Van a haber medidas nuevas», especificaron. Para ello la mira estará puesta hoy en encontrar consenso en una nueva cumbre con referentes del mundo sindical y empresarial.
El encuentro previsto es una continuidad del que tuvieron el jueves pasado los ministros de Economía, Martín Guzmán; de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas y de Trabajo, Claudio Moroni, con el presidente de la UIA, Daniel Funes de Rioja; el secretario de la entidad, Miguel Ángel Rodríguez y los sindicalistas Héctor Daer, Carlos Acuña y Andrés Rodríguez.
Se trata de un tema delicado porque en abril, en medio de la disparada inflacionaria, discuten salarios los gremios que representan a casi un tercio de los trabajadores registrados del sector privado del país. Lo que implica que buena parte del destino salarial del año se jugará en las próximas jornadas.
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