El «Villazo» fue así denominado por la reacción masiva del pueblo de Villa Constitución, en el sur de la provincia de Santa Fe, en rechazo de la represión contra los trabajadores metalúrgicos de la filial, que provocó más de 30 muertos -algunos de ellos desparecidos-, miles de despedidos y alrededor de 300 obreros encarcelados o exiliados.
«Villa Constitución no fue una excepción o un caso aislado. Fue parte del mismo flagelo que sufrió el pueblo argentino, incluyendo a muchos de los que un año antes se enfrentaban por legítimas diferencias. Ese 20 de marzo de 1975 marcó el comienzo de una escalada represiva, que tuvo como objetivo central el movimiento obrero y los sectores populares que ansiaban un país para todos, una Patria soberana y más justicia social», puntualizó la FeTIA en un comunicado.
Agregó que los sectores dominantes negaban esos valores de forma sistemática a través de las sucesivas dictaduras militares y, un año después, el 24 de marzo de 1976, ocurrió a nivel nacional, lo que desató la dictadura más atroz en el país», señaló Héctor Ibarra, secretario general de la UOM de esa localidad.
«La FeTIA, como heredera de ese legado histórico de la lucha de los trabajadores en rechazo de los abusos patronales y la connivencia de las fuerzas represivas, participará mañana a partir de las 10 en en el acto en la Plaza Central de Villa Constitución para recordar a los desaparecidos y asesinados, rendirles homenaje y recoger y honrar sus enseñanzas y lucha», aseguró Wasiejko.
El dirigente es titular de la FeTIA y secretario adjunto de la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA) que también conducen Hugo Yasky (docentes) y Claudio Marín (telefónicos).