A una semana de los comicios que marcarán un cambio de época en el gremio petrolero más poderoso de la Argentina, Guillermo Pereyra pidió por la aprobación de la Ley de Promoción de hidrocarburos. Además aseguró que los 20 mil suspendidos en pandemia ya volvieron al trabajo: «El nivel de empleo es total».
El secretario General del sindicato de Petroleros Privados de Río Negro, Neuquén y La Pampa, Guillermo Pereyra, advirtió que a un año y medio del enorme impacto que dejó a más de 20.000 operarios suspendidos, «hoy el nivel de empleo es total».
Para el sindicato petrolero más fuerte del país, que la semana que viene cambiará su secretario General después de casi 40 años, la pandemia fue un golpe durísimo. En las primeras semanas de la cuarentena obligatoria no fueron considerados como personal esencial y de un día para el otro cerca de 20.000 operarios fueron enviados a sus casas a cobrar salarios recortados.
Según le explicó Pereyra a Diario Río Negro, fueron muchos los trabajadores que terminaron aceptando los retiros voluntarios que varias empresas ofrecieron.
En total fueron 1.800 los trabajadores que se desvincularon en esos meses, en su mayoría en el segmento de las empresas de servicios especiales. Pero Pereyra advirtió que «muchos de esos compañeros que se habían ido, que habían aceptado el retiro porque tenían alguna urgencia, ahora están volviendo».
En tanto que destacó que «nos queda el tema de los contratos a término y en estos días lo hemos resuelto, ya no hay más contratos basura, son todos contratos por tiempo indeterminado».
«Estamos bien y con muchas expectativas de que se pueda aprobar en el congreso el proyecto de ley de Promoción de las Inversiones porque las empresas que quieran verse beneficiadas van a tener que tener una producción incremental, el Plan Gas se extiende con este proyecto u por eso vamos a trabajar muy bien», aseguró Pereyra.
El dirigente que dejará la conducción del gremio tras las elecciones del próximo 20 de octubre, destacó que «hay que hacer más gasoductos porque tenemos una linda oportunidad para llevar el gas a Brasil con la bajada de la producción de Bolivia, tenemos la última oportunidad con esto porque el responsable del cambio climático es el petróleo y si no lo sacamos en los próximos 12 ó 15 años nos va a quedar abajo de la tierra».