La Asociación Argentina de Aeronavegantes, liderada por Juan Pablo Brey, decretó un paro total de actividades en el país para el próximo 28 y 29 de marzo. Así lo decidieron este viernes en una asamblea que se llevó a cabo en el Aeroparque Jorge Newbery, en el marco del “estado de alerta y movilización” decretado el pasado 13 de marzo. Reclaman una urgente recomposición salarial.
Durante la asamblea, Brey indicó que “nos han licuado el 83% de nuestro poder adquisitivo, del salario, en tan solo tres meses». Así, afirmó que «los trabajadores y trabajadoras de la actividad necesitamos urgente una recomposición salarial y el gobierno se niega a hacerlo”, sostuvo el sindicalista quien también es Secretario de Prensa de la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (CATT) y Secretario de Deportes de la Confederación General del Trabajo (CGT).
En ese contexto, desde Aeronavegantes informaron en sus redes sociales que “esta Asamblea en el lugar de trabajo tuvo como objeto transmitir de primera mano los detalles del estancamiento absoluto de las negociaciones con el Gobierno por la ya impostergable recomposición salarial”. En este sentido, aseguraron que “el tiempo lógico y racional de una negociación de estas características y en semejante contexto inflacionario ha sido excedido, y la inexistencia de una oferta es insostenible”.
De esta forma, aseveraron que el paro se dio a pesar de que “hemos agotado todas las instancias existentes para evitar llegar a esta decisión”. Sin embargo, que “la ausencia de respuesta por parte de las autoridades es total” y que “damos aviso de esta medida con la antelación suficiente para minimizar el impacto sobre los usuarios”.
Finalmente, en el texto concluyeron que “la oportunidad de resolver este conflicto está en manos del Gobierno Nacional y la afectación del servicio a los pasajeros es su plena responsabilidad”. Y sobre los trabajadores de su gremio, finalizaron que “los Tripulantes de Cabina debemos enfrentar unidos y con determinación esta lucha por nuestros ingresos, que ya no admiten más deterioro ni demoras”.