La producción se desplomó 40 puntos en enero. «No estamos tranquilos. Hay mucha incertidumbre», subrayó el secretario general de Smata Rosario, Marcelo Barros. Recordó que General Motors dejó de fabricar el Chevrolet Cruze en diciembre.
El sector automotriz experimentó un fuerte derrumbe en enero, en medio de la fuerte caída del poder adquisitivo. Según ADEFA, la cámara que engloba a las terminales, informó que en enero la producción de vehículos alcanzó las 22.643 unidades, 38,8% menos que diciembre y 16,7% por debajo del volumen de enero de 2023.
En ese marco desde el gremio de mecánicos encendieron todas las alarmas ante la situación de incertidumbre que se vive en torno a la planta de General Motors de Alvear. El secretario general del Sindicato de Mecánicos y Afines del Automotor (Smata) de Rosario, Marcelo Barros, confirmó que la fábrica ubicada en el Gran Rosario tiene suspendido a su personal «hasta el 4 de marzo».
Mediante un acuerdo alcanzado con las terminales automotrices los trabajadores «cobran el 76 ó 78 por ciento» de los sueldos.
Según Barros, «el trabajador no pierde poder adquisitivo, pero igualmente esta es una situación de alarma. Por más que el trabajador se quede en la casa, la empresa tampoco aclara bien qué está pasando. No hay que olvidar que el Chevrolet Cruze no se fabrica más desde diciembre y en la fábrica hubo 130 retiros voluntarios».
En declaraciones a LT8, el titular de Smata en Rosario agregó que al no fabricarse más el Cruze en Argentina, «la funda para la Tracker la traen de Brasil y la parte de costura, donde había chicas con 20 años de trabajo, lamentablemente se tuvo que cerrar. Además, en la ex Beta que ahora es del grupo Quijada y en la Peugeot de Virasoro y San Martín, salieron con retiros voluntarios entre 20 y 22 personas».
«El panorama en el sector automotriz está complicado, y estamos esperando que llegue el 4 de marzo para ver qué decidirá General Motors. Estamos con mucha incertidumbre, porque no se sabe si va a cerrar o reabrir y no queda otra que esperar hasta el 4 de marzo. Para colmo bajaron las ventas un montón. Las automotrices quieren vender, pero la gente no puede comprar», subrayó Barros.