Los directivos de Envases del Plata confirmaron ayer las cesantías de otros 35 trabajadores de esa empresa y amenazaron con profundizar el ajuste mientras la planta estuviera paralizada. Los nuevos despidos se concretaron mientras los trabajadores de la metalúrgica del oeste bonaerense protestaban contra los primeros 20 despidos anunciados anteayer por marchar contra la reforma previsional.
“Nos reunimos con los empresarios pero no llegamos a un acuerdo porque nos dijeron que mientras sigamos con las medidas de fuerza, van a seguir despidiendo”, advirtió a Página/12 Agustín Colovos, delegado de UOM.
Desde las 4 de la mañana de ayer los 400 operarios se concentraron pacíficamente en los portones de la fábrica, donde los esperaban los mismos efectivos de la Policía Bonaerense que el miércoles habían notificado los primeros despidos. Ante la falta de diálogo con los empresarios, los trabajadores confirmaron que hoy tendrán una audiencia en el Ministerio de Trabajo.
“Nosotros no vamos a arrancar a producir hasta que no reincorporen a los compañeros despedidos”, afirmó el delegado de la planta. Los trabajadores en conflicto recibieron el respaldo del secretario de la UOM, Antonio Caló, y de la Región Oeste de la CGT.
Los empleados reiteraron que los despidos responden a “un intento de flexibilizar las condiciones de trabajo” y no a una supuesta crisis. “Quieren imponer la multifunción en dos áreas, mantenimiento y compactado. Están envalentonados con la ola amarilla”, indicaron.
La policía Bonaerense con patrulleros, grupos antidisturbios y efectivos con ropa de fajina mantiene su presencia en la fábrica ubicada en el municipio de Morón, donde gobierna Ramiro Tagliaferro, ex marido de la gobernadora María Eugenia Vidal.