La novela que tiene como protagonistas a Ricardo Cirielli y Hugo Moyano por la conducción del estratégico gremio de técnicos aeronáuticos incorporó un nuevo capítulo administrativo.
Luego de la escandalosa asamblea que se había convocado para elegir la junta electoral que fiscalice la renovación de cargos en la Asociación del Personal Técnico Aeronáutico (APTA), el Ministerio de Trabajo resolvió que por los hechos de violencia quedó suspendida y deberán volver a juntarse las partes.
Es que aquel encuentro del 8 de junio terminó con ataques del oficialismo que lidera Ricardo Cirielli a los opositores que incluyeron golpes, palos y hasta el tan de moda gas pimienta.
La oposición había pedido la nulidad de lo resuelto en esa oportunidad por “nula jurídicamente y carente de legalidad” y, por lo tanto, una nueva convocatoria. A ese reclamo es al que hizo lugar el Ministerio de Trabajo.
En APTA Cirielli busca la reelección por un nuevo período y se enfrentará a un conglomerado de agrupaciones opositoras que incluyen a moyanistas, sectores de izquierda y ex ciriellistas.
Al mismo tiempo Trabajo convocó a las partes a una reunión para mañana, jueves, para poder avanzar en alguna salida que destrabe la situación y permita seguir con el calendario electoral de manera transparente.
La perlita del enfrentamiento es que Cirielli y Moyano son socios en la conducción del Club Atlético Independiente. Asumidos hace menos de un año, la cúpula de dirección del club de avellaneda lo tiene al camionero como presidente y al aeronáutico como su secretario de Prensa.