Octavio Argüello, el triunviro cegetista, insistió en que no hay humor social para un paro y que «la sociedad está creyendo en este Gobierno». Sin embargo planteó que «si el Gobierno piensa terminar con las paritarias libres vamos a terminar en un gran plan de lucha».
El triunviro de la CGT y dirigente camionero, Octavio Argüello, habló de las dificultades que tiene la central obrera para tomar decisiones y encontrar una síntesis de todos los que participan de Azopardo: «Cuando hay un triunvirato hay que conversar con los compañeros para ver a que posición se puede llegar».
El dirigente, que reemplazó a Pablo Moyano en la cúpula de la CGT, apuntó de contra la política salarial de la gestión libertaria: «Para este Gobierno que es tan liberal, es todo libre menos los sueldos», planteó en declaraciones a C5N.
Y puso como ejemplo lo ocurrido en la paritaria sectorial de los Camioneros: «Habíamos cerrado un 8,5% y un bono de 580 mil pesos. Ellos no quieren firmar más que los 2 puntos que dice la inflación».
«Si nos pusimos de acuerdo es porque los empresarios no regalan nada y nosotros pedimos lo que corresponde. Ahora estamos en una conciliación y después quedamos liberados a tomar las acciones que nos parezcan pertinentes», precisó.
Respecto del rol de la central en la gestión de Javier Milei, repasó: «El movimiento fue el primero que se paró en la calle contra este Gobierno. Hicimos varias medidas y no hemos tenido la repercusión que uno esperaba. La sociedad está creyendo en este Gobierno».
Y dejó una definición a futuro: «Si el Gobierno piensa terminar con las paritarias libres vamos a terminar en un gran plan de lucha».