Arranca el Frente Amplio UNEN sin pata sindical

Ayer se lanzó oficialmente, con bombos y platillos, el Frente Amplio UNEN (FAUNEN), que surge de la alianza entre dos frentes electorales, el Frente Amplio Progresista (FAP) y el UNEN. Matices ideológicos sobran. La unión cosechó simpatías mediáticas de, por ejemplo, el Grupo Clarín, con su periodista estrella Jorge Lanata incluido.

Carecen, sin embargo, de cualquier componente sindical de peso. La CTA opositora, que había apoyado al FAP en su momento, terminó por alejarse manteniendo su propio espacio político, la Unidad Popular, con el histórico Víctor De Gennaro a la cabeza.

La presencia sindical en la política nacional es innegable, y no lo es menos en un contexto de puja distributiva como el presente. Como botón demuestra alcanza con el reciente paro del 10 de abril. Pero lo cierto es que a diferencia del kirchnerismo y hasta del massismo, el nuevo frente no pudo o no quiso incorporar a representantes gremiales en su flamante espacio.

El no-peronismo se las ve más difícil con un sindicalismo mayoritariamente peronista, pero lejos estamos de épocas anteriores, como los 80, con un sindicalismo todavía encuadrado en una misma línea. Si hasta la propia Alianza de Fernando De la Rúa contó con cierto apoyo sindical.

Por otro lado, lo cierto es que el campo actual del sindicalismo presenta una fragmentación que permite flexibilizar acuerdos. De hecho, la CTA opositora había confluido con el FAP, apoyando la candidatura de Hermes Binner en 2011. Ahora sin embargo es distinto, según explica el propio De Gennaro: “Participamos cuando fueron experiencias que quisieron construir algo propio”, pero ahora “se subordinan a la estrategia de la UCR”.

Desde luego, no todo está dicho. Habrá que esperar para ver si logran un acuerdo, pero la posición que expresa el líder de Unidad Popular, es la misma que vienen manteniendo para separarse de otras experiencias similares. Como lo hizo el diputado Claudio Lozano separándose de Proyecto Sur y luego del Frente Amplio Progresista (FAP).

Si el experimento FAUNEN funciona bien, existen otros espacios sindicales “a disposición” de incorporarse a expresiones políticas como la CGT de Barrionuevo. Pero si hasta para Massa el gastronómico resulta piantavotos y niega su inclusión en el Frente Renovador, más aún lo será para la gente de Elisa Carrió y Pino Solanas.

El moyanismo, por su parte, también resulta difícil de imaginar en un espacio no-peronista, pero no faltan fotos inverosímiles como la del camionero con Margarita Stolbizer y Hermes Binner, en febrero pasado, que habilitan la hipótesis.

Especulaciones al margen, y con un largo camino a transitar hasta 2015, hoy por hoy existe la propuesta puertas adentro de FAUNEN de sumar a Mauricio Macri, pero no se oyen nombres del mundo del trabajo.