El secretario General de la Asociación Trabajadores del Estado (ATE), Hugo Godoy, rechazó «la decisión oficial de adoptar un giro conservador como respuesta a dos meses de golpe de mercado, que procuró imponer una devaluación y una política económica determinada», y se opuso a los recortes presupuestarios en varias áreas.
«Los anuncios realizados durante la breve gestión al frente de Economía de Silvina Batakis y las medidas adoptadas ahora por su sucesor Sergio Massa, refrendaron ese giro y lo profundizaron. A partir de la decisión de cumplir con las imposiciones del acuerdo firmado con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y de ‘corregir los desvíos’ de las metas convenidas, la política oficial abraza los principios de la ortodoxia», puntualizó Godoy.
El recientemente electo por cuatro años titular nacional de la CTA Autónoma agregó en un documento que «la decisión de ‘gastar solo lo que se recaude’, el ‘congelamiento de vacantes’ y ‘pagar el valor real por los servicios’ y otras declaraciones de la gestión rememoran discursos de otras épocas», dijo.
«Se aumentaron las tasas de interés a niveles próximos al 90 por ciento; se incrementó la velocidad de la devaluación del Banco Central (BCRA) y se aplica un verdadero tarifazo, que supera con creces la quita de subsidios anunciada por el ex ministro Martín Guzmán. Son todos compromisos asumidos con el organismo multilateral», remarcó el dirigente.
Godoy sostuvo además que «la voracidad del acreedor empero nunca alcanza, por lo que es preciso cumplir con la meta anual de un déficit primario de 2,5 por ciento del Producto Bruto Interno (PBI), para lo cual se acaba de anunciar un ordenamiento fiscal, que constituye un eufemismo interesante para no hablar de un ajuste de 128 mil millones».
El sindicalista enfatizó que «este ajuste no terminará aquí, ya que todavía existe espacio para que cada ministerio aplique sintonía fina en los gastos respectivos», luego de aplicar «una poda de más de 60 mil millones para los Fondos de Garantía Recíproca (Fogar) y de Desarrollo Productivo (Fondep), líneas de crédito asignadas a las pymes», remarcó.
«La combinación de tarifazos, tasas elevadas y devaluación, y la supresión del fomento del crédito profundizarán el enfriamiento de la economía, una receta ortodoxa para frenar la carrera de los precios. Además, hubo un recorte de 50 mil millones de la partida del Procrear de la cartera de Desarrollo y Hábitat Territorial», puntualizó el gremialista.
Godoy rechazó también la reducción de 50 mil millones de pesos para el programa «Conectar Igualdad», justificado en «la ausencia de dólares en las reservas para adquirir equipamiento», y añadió que achicar «la brecha tecnológica de los menores de todo el país más postergados debería ser una prioridad insoslayable» de la actual gestión.
«Salud tuvo más suerte y solo sufrió un recorte de 10 mil millones para campañas de vacunación a partir de que supuestamente por razones geopolíticas no se adquirirán vacunas Sputnik y que es suficiente el stock. Es imposible entender la poda por ese mismo monto operada en la cartera de Transporte por las debilidades de su infraestructura y los constantes conflictos en la prestación del servicio de pasajeros», argumentó Godoy.
También rechazó el recorte de 20 mil millones de pesos operado en la cartera de Obras Públicas porque provocará «el retraso en el inicio de varias obras», y concluyó que todas esas medidas «son conservadoras y cedieron al golpe de mercado de dos meses».