Todo llega. La frase parece encajar más que nunca para el titular de los gastronómicos, Luis Barrionuevo, que en febrero había descalificado a los despedidos y hoy vive una situación similar en su gremio. Es que tras las cesantías masivas en el Estado en varios sectores de la economía se replicó la situación.
Ayer fue la Federación Empresaria Hotelera Gastronómica, que nuclea 35 mil restaurantes y 15 mil hoteles que emplean, en total, a 500 mil personas, la que advirtió sobre la posibilidad de despidos masivos en el sector.
«Con gran esfuerzo no ha habido despidos hasta el momento, pero lamentablemente algún establecimiento lo va a tener que tomar», aseguró Roberto Brunello, titular de la Federación
«Bajó el consumo y la inflación que estamos sufriendo es bastante importante. Nosotros no somos formadores de precios, no asumimos la responsabilidad de los aumentos», analizó.
Esta semana, empresarios hoteleros y gastronómicos habían manifestado su preocupación por el impacto que podría acarrear el aumento en las tarifas de servicios sobre sus costos, además de la fuerte presión impositiva y el crecimiento de lo que denominan la «oferta informal».
De hecho la Encuesta de indicadores Laborales que difundió el propio Ministerio de Trabajo en febrero marcó una incipiente caída en los puestos de trabajo de los gastronómicos. El relevamiento indicó que en el Comercio, Restaurantes y Hoteles el empleo retrocedió un 0,2%.