Hugo Moyano afirmó en un comunicado de prensa que ayer la CGT cumplió 85 años de vida y reseñó que en esa época dirigentes que «no hacía mucho habían bajado de los barcos no paraban de deslucir con politiquerías indescifrables el derecho de los trabajadores».
«No había día en el que no se enredaran en interminables debates políticos, llenos de conceptos teóricos que arrastraban desde la Europa empobrecida que, sobre la base del hambre, los había expulsado a este continente. Insistían en vanas querellas y controversias ideológicas que en nada ayudaban a mitigar la explotación en la que estaban sumidos los obreros», afirmó.
El titular de una de las CGT agregó que integraban la Confederación Obrera Argentina (COA) y la Unión Sindical Argentina (USA), que se fusionaron un 27 de septiembre de 1930, aunque luego de muchos años de «idas y vueltas, escándalos y escaramuzas, en 1942 esa conducción se dividió otra vez en dos entidades».
Moyano añadió que en 1945 el entonces secretario de Trabajo y Previsión Social, el coronel Juan Domingo Perón, fue encarcelado en la isla Martín García y, aquellas dos centrales, observando la efervescencia que causó en los obreros su detención, se unificaron y decidieron convocar a un paro general el 18 de octubre de 1945.
«La impaciencia del pueblo no esperó y ganó las calles un día antes, el 17, cuando nació formalmente el peronismo, una nueva corriente política histórica, en una jornada que corroboró que los trabajadores son los verdaderos impulsores de esa ideología al defender con uñas y dientes al constructor de la justicia social», puntualizó Moyano en el documento de prensa conmemorativo.
También enfatizó que luego de siete años de aquella histórica jornada y un día después de los festejos del Día de la Lealtad del 18 de octubre de 1950, el presidente Juan Perón inauguró el edificio de la CGT, donado por la Fundación Eva Perón.
La central obrera indicó que desde ese día la CGT tuvo «su propio emplazamiento en Azopardo 802, desde donde se defienden los derechos de todos los trabajadores, piensen como piensen», y agregó que desde aquellos días y hasta hoy «las reivindicaciones logradas demostraron que los reclamos son mucho más importantes que cualquier autorización que procure evitarlos».
«Los dirigentes que lleguen a esta casa tienen la obligación de ocuparse y de intentar solucionar por todos los medios las protestas obreras. El consejo directivo de la CGT homenajea hoy a todos aquellos que dieron sus vidas por la defensa de los derechos de los trabajadores», concluyó el documento firmado por Moyano.