La falta de definiciones del Gobierno ante el reclamo por la rebaja del impuesto a las Ganancias profundizó entre la dirigencia gremial el análisis de posibles esquemas para reducir el impacto del tributo sobre los sueldos, al punto que en algunos sindicatos ya evalúan exigir la reapertura de paritarias para intentar compensar el deterioro salarial por efecto del impuesto.
El gremio de bancarios picó en punta en esa estrategia: tras cumplir ayer con un nuevo paro de 24 horas en contra del polémico tributo, anticipó que pedirá reiniciar las negociaciones con las cámaras que agrupan a los bancos para discutir un aumento salarial adicional al acordado para todo el año que contrapese los descuentos por Ganancias.
Al respecto, el titular de la AB, Sergio Palazzo, indicó a El Cronista que la idea del gremio es aprovechar el plazo de la conciliación obligatoria dictada por el Ministerio de Trabajo para avanzar en ese objetivo. El ministro de Trabajo, Carlos Tomada, convocó a una reunión para la próxima semana con las cámaras y allí vamos a pedir que los bancos se hagan cargo del tema del mínimo no imponible, indicó el dirigente. Según los cálculos del sindicato, por el impacto del impuesto los trabajadores del sector alcanzados por Ganancias (alrededor del 95%) perdieron casi 5 puntos porcentuales del aumento salarial del 31% que acordaron en marzo pasado.
La preocupación de los bancarios es compartida por un amplio conjunto de gremios tanto afines como opositores al Gobierno, que acumulan malestar con la administración kirchnerista por la demora en implementar cambios para reducir la carga el tributo sobre los sueldos. En la conducción de la CGT oficial, que lidera Antonio Caló, habían apostado todas las fichas a que el Gobierno decretaría la excepción del medio aguinaldo de julio del pago de Ganancias, pero la falta de anuncios ahondó la bronca en importantes gremios.
En un intento por calmar el creciente malestar interno, Caló prevé reunir la próxima semana (posiblemente el miércoles) al consejo directivo de la entidad. Allí espera el consenso de la dirigencia para iniciar una nueva ronda de negociaciones con funcionarios del Ejecutivo destinada a renovar la presión por una reforma del impuesto. Sin embargo, en algunos gremios desconfían del éxito de las gestiones ante la Casa Rosada y no descartan avanzar en la misma línea de los bancarios y reclamar una compensación salarial por los descuentos de Ganancias.
En tanto, también Hugo Moyano, que lidera la CGT opositora, acelerará desde la próxima semana los preparativos para la convocatoria a un nuevo paro nacional, que abarcará el reclamo por Ganancias. La intención del camioneros es volver a sumar a su ofensiva la adhesión de la CGT Azul y Blanca, de Luis Barrionuevo, la CTA disidente, de Pablo Micheli, y los gremios de La Fraternidad y la UTA.