La mesa de negociación fue acordada el 23 de diciembre, tras casi una semana de toma del Ministerio de Ciencia y Tecnología y en ese momento el ministro Lino Barañao se comprometió a dar solución a los más de 500 investigadores de Conicet que ganaron su concurso y por el ajuste presupuestario quedaron en la calle.
La mala nueva se concretó en el segundo encuentro de la comisión de seguimiento. Es que, segpun contaron desde la agrupación Jovenes Científicos Precarizados «el Gobierno ha reconocido de manera fehaciente que se dispone a ignorar el acuerdo firmado no en uno sino en varios aspectos».
Es que no sólo no le garantizan el ingreso a Conicet a los científicos que ganaron su concurso, sino que ahora tampoco garantizan la inserción prometida en otros organismo o instituciones, como estaba previsto.
«En la reunión, los funcionarios reconocieron que contrariamente a lo que afirmaron en diciembre, no cuentan con fondos para garantizar la reinserción de los compañeros, ni en el CONICET ni en otros ámbitos», detallaron.
Además, en caso de que alguna institución descentralizada del Estado (que mantienen sus ingresos congelados) decida incorporar con fondos propios a algunos de los investigadores afectados, no se garantizan condiciones de contratación acordes al concurso ganado. Es decir, serían sumados con contratos basura.
«De no mediar un cambio en esta posición, Barañao y el Gobierno de Macri serán los reaponsables de una nueva radicalización del conflicto, en la que no podemos descartar que se produzcan nuevas ocupaciones de los lugares de trabajo», concluyeron.