«Barba» Gutiérrez destacó la visita de Triaca a la sede cegetista de Azopardo 802 y valoró que el Gobierno «haya cambiado» la postura «de calificar al sindicalismo de mafioso», al aludir a los términos utilizados por el presidente Mauricio Macri, cuando en un acto en abril último habló de «combatir las mafias sindicales».
«El encuentro fue positivo porque se reconoce que los derechos de los trabajadores se institucionalizaron con el general Perón y con Evita, y nadie está dispuesto a ceder y a cambiar, y también porque el Gobierno no quiere modificar los convenios colectivos de trabajo, sino que todo se va a hacer por consenso», indicó Gutiérrez explicando el resultado de la reunión.
Aseguró que el encuentro con el ministro obtuvo el beneplácito de la cúpula sindical al recibir el compromiso de que no existe «una política de atacar o modificar el modelo sindical argentino».
Consultado por radio Splendid, el dirigente metalúrgico consideró que por el momento la CGT «no ve motivo para un paro o una medida de fuerza» y supeditó una eventual medida de fuerza a «que no se nos ataque o se nos pretenda hacer por decreto medidas que modifiquen los derechos de los trabajadores».
De todas formas, adelantó que en la reunión del Comité Central Federal que se realizará en la primera semana de octubre se debatirán las distintas posturas, y que si «algunos piden paro está bien, pero que dos pidan no puede ser superior a 300», dijo en alusión a la Corriente Federal y al sector de Pablo Moyano que muestran posiciones más duras.
Gutiérrez también puntualizó el lugar que debe ocupar el sector empresario en el camino del diálogo al señalar que la CGT «quiere en la mesa a los grandes grupos empresarios, para que se comprometan con la inversión y con los trabajadores, y no a llevar sus ganancias a los paraísos fiscales».
Sobre la situación económica, que según los últimos índices oficiales marcan un crecimiento de la economía del 2,7%, el gremialista admitió «una estabilidad económica que genera una recuperación», pero dijo que «todavía estamos por debajo del 2015».
Puntualizó que esa recuperación se ve reflejada en la obra pública y en el campo, en tanto que sectores fabriles como la industria textil y la del calzado «están mal por la apertura de las importaciones».
Finalmente y consultado sobre el aporte que puede hacer, en caso de ser elegida senadora nacional, la ex presidenta Cristina Kirchner, Gutiérrez consideró que es una figura política «fuerte», y que su Gobierno «ha sido un baluarte con respecto a la legislación laboral y al movimiento obrero», por lo cual confió en que desde su banca «será defensora de las leyes laborales».