El encuentro reunió a varios gremios de primera línea de la CGT, incluido el cotitular de la CGT Carlos Acuña. Le plantearon a Gerardo Martínez la necesidad de abrir el debate en la central obrera para endurecer su posicionamiento respecto del Gobierno Nacional. Además expusieron los problemas de las obras sociales y hasta esbozaron la posibilidad de movilizar a la Superintendencia de Servicios de Salud.
El Gastronómico Luis Barrionuevo reunió a su círculo de dirigentes de mayor confianza. Fue en un almuerzo que hizo de las veces de reagrupamiento de fuerzas de lo que supo ser la CGT Azul y Blanca y de espacio de catarsis colectiva respecto de los problemas que atraviesan con la gestión de Javier Milei y con la falta de participación en la cotidiana de la CGT.
Entre quienes participaron estuvieron el cotitular de la CGT, Carlos Acuña, el líder de la UTA, Roberto Fernández, Pedro Zambeletti (pinturas), Facundo Aveiro (químicos), Luis Alberto García Ortiz (supervisores metalúrgicos) Oscar Rojas (Maestranza), Daniel Vila (Carga y Descarga), Roberto Solari (guardavidas), Luis Cejas (viajantes) y Rubén Aguiar (panaderos), entre otros.
Además, en representación de la conducción cegetista y para darle contención política y sindical a la situación, estuvo presente Gerardo Martínez, el líder de la UOCRA y virtual canciller de Azopardo.
Entre las cuestiones se plantearon estuvo la posibilidad de protagonizar una movilización a la Superintendencia de Servicios de Salud. Sería para protestar y visibilizar la falta de respuesta de los funcionarios libertarios ante la crisis de financiación del sistema de obras sociales sindicales.
También manifestaron la necesidad de tener una CGT más activa, con mayor grado de participación de todos los sectores y con más dinamismo ante lo grave de la situación económica y social. Entre las críticas que se llevó Martínez apareció la escasa cantidad de reuniones de Consejo Directivo y la constante toma de decisiones en cónclaves de Mesa Chica a la que no suelen ser convocadas todas las tribus internas.
Recordemos que tras el fugaz apoyo a la candidatura presidencial de La Libertad Avanza entre las PASO y las generales, la relación entre Barrionuevo y Milei entró en etapa de confrontación abierta. Eso repercutió en varios niveles, incluso en la potente interna que transitan los gastronómicos por el control de la seccional porteña con activa participación de los funcionarios libertarios.