Las mujeres consiguen salarios que son un 30% menores a los que perciben los hombres. Los datos surgen del último informe del INDEC sobre Evolución de la Distribución del Ingreso, que surge de la Encuesta Permanente de Hogares, correspondiente al segundo trimestre de este año.
El informe del INDEC dice que la mediana del ingreso de los hombres es de 7.000 pesos por mes, por haber trabajado 43 horas. Esto da un valor de 162,8 pesos por hora. Para las mujeres, el ingreso es de 5.400 pesos, por haber trabajador 32 horas en el mes, a razón de 168,8 peso la hora.
La diferencia de ingresos mensuales se mantiene así en un 29,6% en favor de los hombres, pero como se ve, las mujeres cobran un 3,6% más por cada hora trabajada.
Sucede que los hombres y las mujeres no ingresan de la misma manera al mercado laboral. Las mujeres ingresan con la carga de tener que cumplir la mayor parte del trabajo doméstico no remunerado.
Según los datos que proporciona la primera encuesta sobre trabajo domestico no remunerado y uso del tiempo, el 88,9% de las mujeres se ocupa de tareas domesticas, mientras que en los hombres el porcentaje se reduce al 58,2%.
Pero no es todo, sucede que las mujeres dedican en promedio 3 horas diarias más que los hombres en estas actividades. Esta desigual distribución por sexo evidencia la persistencia de modelos culturales y estereotipos de género.
Por lo tanto las tareas que debe afrontar en el hogar le restan tiempo para dedicarle a sus empleos remunerados y se produce un fenómeno de desgrane. Es decir, una mujer con ingresos salariales bajos tiene menos reparos en abandonar la actividad laboral que esté desarrollando para, por ejemplo, dedicarse a trabajar en su hogar o sencillamente ocuparse de su familia.
Eso se grafica en que si bien las mujeres representan la mitad de la población, su tasa de empleo es notablemente más baja que la de los varones (43,1% para las mujeres y 67,8% para los varones).
Por último hay que remarcar que el acceso de las mujeres a cargos directivos es sensiblemente menor que el que tienen los hombres.
Según un relevamiento realizado por al Fundación PROEM, con datos provistos por la Organización Internacional del Trabajo (OIT), a nivel mundial, sólo el 13% de las empresas medianas y grandes son dirigidas por mujeres. Esta cifra refleja las dificultades que afrontan a la hora de acceder a cargos directivos, a pesar de igualar o superar la formación de sus pares varones.