Los turbulentos momentos en el Sindicato de Obreros Marítimos Unidos (SOMU) parecen no tener fin. Días atrás, en el juzgado federal de la jueza María Servini de Cubría, se denunciaron amenazas por parte de Omar «Caballo» Suarez de provocar “suicidios” contra los denunciantes en las causas que lo investigan.
Según declaro «Caballo” Suárez a testigos, quienes lo denuncian en la justicia terminarán suicidados “…como lo que le paso a Coll” (sic). El comentario hace referencia a la muerte, años atrás, de Juan José Coll, Secretario Adjunto del SOMU, enfrentado con Suárez y muerto con una escopeta.
El suicidio al que se refiere Suarez, nunca fue esclarecido y se produjo en circunstancias dudosas. Desde la oposición remarcan que el titular del SOMU «siempre ha dejado entrever una supuesta autoria en el hecho, haciendo alarde del suceso en numerosas ocasiones».
Pero este no es el único caso de violencia en el gremio, que viene padeciendo numerosos hechos criminales y de tinte mafioso. Desde la oposición recuerdan que hace un tiempo se colocó una bomba en la casa de la hermana del Secretario de Maquinas, Nicolás Racco, quien se encontraba allí junto a su familia y que pudo salir ileso del atentado.
También apuntan a emboscadas con vehículos y numerosas amenazas en el domicilio privado contra el Secretario General Juan Francisco Arce y su familia para exigirle la renuncia.
Además recuerdan la muerte del dirigente del gremio, Alberto Rodríguez, luego de que este se opusiera a la compra de un terreno en Monte Caseros. Días más tarde fue asesinado de varios disparos por la espalda.
Como si esto fuera poco, los dirigentes denunciantes recuerdan el asesinato de la joven Karina Yerbal, amante de Suárez, quien estaba por dar aviso al ex intendente de Monte Caseros, Eduardo Galantini, que iban a asesinarlo.
Por último enumeran la muerte del propio hermano de “Caballo” Suarez, Antonio Suárez, presidente de la Obra Social del Personal Marítimo, “suicidado” con una escopeta, junto a su esposa, en circunstancias nunca esclarecidas.
La violencia en el gremio se suma a las denuncias de vaciamiento del SOMU, operaciones de armado de un Holding de empresas privadas pertenecientes a Suárez o testaferros utilizando la influencia del sindicato, falsificación de documentación, desprolijidades en el manejo de fondos de la Mutual Sindical y, la separación irregular y antiestatutaria de ocho dirigentes nacionales, con la prohibición de entrada con el Ejercito Argentino.
Por esto último el Juzgado Nacional de Primera instancia del Trabajo N° 62 a cargo de Doctor Miguel Omar Pérez resolvió la reincorporación inmediata de los dirigentes proscriptos que atenta gravemente contra el modelo sindical argentino y el derecho básico de libertad sindical.
A pesar de todo ello, la justicia laboral parece tomarse su tiempo y obviar la violación a una resolución judicial por parte de “Suarez, lo cual, sostienen los dirigentes opositores «confiere una violación grave a la Ley, con consecuencia inmediata de prisión, por no reconocer una demanda judicial».