En la asamblea más importantes del Sindicato de Petróleo y Gas Privada de la provincia de Santa Cruz, los afiliados decidieron, por unanimidad, desafiliarse a la Federación Argentina de la actividad que comanda el dirigente sindical y Vicepresidente de del bloque del Frente Renovador en la cámara de diputados, Alberto Roberti.
La decisión es un golpe a las aspiraciones políticas de Roberti y, fundamentalmente, un golpe a las arcas que maneja el dirigente massista para realizar sus campañas políticas.
Es que la Federación se queda con una porción de los aportes de los gremios de base y desde las seccionales lo acusan de utilizarla para hacer política, en lugar de darle beneficios a los afiliados.
«Ahora le decimos a la Federación Argentina de Petróleo, Gas Privado y Combustible que se terminó su tiempo en Santa Cruz y que (sus dirigentes) no nos van a poder robar más” sentenció el secretario general del gremio de esta provincia, Claudio Vidal, quien fue ovacionado por la multitud que se concentró en el césped del campo deportivo municipal.
El inicio de la asamblea estaba previsto para las 12, pero la demora en las acreditaciones y el tiempo que demandó la revisión de todos los trabajadores por razones de seguridad, se dilató hasta cerca de las 15.
No se registró ningún tipo de incidentes y las fuerzas policiales se ubicaron en cercanías del perímetro del estadio, en tanto que los efectivos de Gendarmería se instalaron en el límite interprovincial con Chubut (subcomisaría de Ramón Santos) y los accesos sur y oeste de la ciudad, dejando el control interno a personal de un servicio de seguridad privada y que dependía directamente del gremio petrolero de base.
A su vez, el Ministerio de Trabajo de la Nación dispuso la presencia de casi medio centenar de inspectores de Caleta Olivia, Comodoro Rivadavia, Trelew, Puerto Madryn y Bariloche, quienes se desplegaron en las tribunas del estadio para evaluar cada situación.
Roque Vitale, responsable del organismo laboral en esta ciudad, dijo que las dos mociones centrales que se aprobaron a mano alzada (desafiliación y quite de los aportes económicos a Federación) fueron avaladas en un 100%, aunque resulta oportuno mencionar que dos personas, un hombre y una mujer, fueron los únicos que levantaron sus manos a la hora de preguntar quiénes se oponían.
La comisión directiva, que fue electa el 20 de noviembre de 2014, también contó con el apoyo de una delegación de casi 150 petroleros del Sindicato Chubut y otra de 50 hombres pertenecientes al Sindicato de Petroleros Jerárquicos.
Luego de aprobado los dos puntos principales, a través del asesor médico, Ariel Varela, el gremio anunció oficialmente que ya había firmado contrato con la obra social OSPE, la cual reemplazará a OSPEGAP, aclarándose que quienes quieran continuar con esta última podrán hacerlo.
Claudio Vidal habló ante la multitud en dos etapas mostrándose sensiblemente emocionado por la gran cantidad de trabajadores que respondieron a la convocatoria, muchos de los cuales arribaron desde Pico Truncado, Las Heras, Río Gallegos y Sarmiento.
En principio, antes de la votación dio una suerte de arenga, indicando que el de ayer fue un día en el que se cambiaba la historia del gremio.“Nos ha costado mucho llegar hasta aquí porque también fueron muchas las piedras que nos pusieron en el camino. A lo largo de los años se nos ha negado el derecho y la posibilidad de ser trabajadores que disfruten de grandes beneficios, de infraestructura y de una buena cobertura médica”, denunció.
Sobre ese último aspecto, lamentó profundamente que hayan fallecido numerosos trabajadores o sus familiares “por no tener una obra social digna” atribuyendo tal responsabilidad “a los inmorales de Federación” por lo cual, sostuvo, “hoy se terminó la corrupción”.
Inmediatamente después trajo a colación que “nos engañaron cuando intervinieron el gremio con promesas falsas” y prueba de ello fue “el despido de 700 compañeros que no pudieron llevar el pan a sus casas, mientras que esos señores que viven a casi dos mil kilómetros de distancia se dan la gran vida”.
Por ello, dirigiéndose directamente al principal dirigente de Federación, Alberto Roberti, dijo que “no le tengo ni le tenemos miedo” y que consecuente ayer no se corría una página de historia sino que se cierra un libro para escribirse otro y consecuentemente “vamos a seguir luchando hasta las últimas consecuencias”.
Al respecto, Vidal explicó que se exigirá a la clínica privada que capitó con Federación que devuelva las instalaciones y además adelantó que se entablará un juicio a Roberti por “haberse apropiado indebidamente del dinero de los petroleros santacruceños”.