El bono de fin de año acordado entre la CGT y el Gobierno Nacional sigue generando polémica y rechazo desde los sectores opositores. Ahora fue el turno de los estatales de ATE, que ya avisaron que rechazaban la medida, los que difundieron un estudio en el que remarcan la magnitud del ajuste en los sueldos de los empleados públicos.
Basados en un trabajo elaborado por el Instituto de Estudios sobre Estado y Participación de ATE, los conducidos por Hugo «Cachorro» Godoy catalogaron de «escandalosa» la negociación hecha por UPCN con Mauricio Macri, «a espaldas y postergando el interés de los trabajadores estatales».
Para Claudio Lozano, el economista emblema de la organización, “la decisión de pagar un bono que compense lo perdido por los trabajadores en el año 2018, supone evaluar a cuánto asciende dicha pérdida. El resultado es preciso: los estatales perdieron en el 2018 el equivalente a tres salarios».
Según el informe elaborado por Lozano, «dado que las categorías más pobladas presentan salarios que oscilan entre los $26.000 y los $32.000, el bono para compensar debiera ubicarse entre $77.000 y $93.000».
Es decir, el bono ya acordado por Andrés Rodríguez representa apenas el 6,4% de lo perdido por los trabajadores sector público.
El otro tema que se posterga en el marco de la discusión sobre el bono es el aumento salarial que necesitarían los estatales para que su salario volviera a los niveles de diciembre del 2017.
De acuerdo al material elaborado por ATE el aumento necesario a recibir ya, debería ascender al 22,3%.