Antonio Caló y Ricardo Pignanelli refrendaron su alianza que los llevó a reflotar la Confederación de Sindicatos Industriales y se reunieron con la gestión de Kicillof. Les presentaron un plan para promover la industria. “Es un plan ambicioso que busca incentivar el desarrollo de inversiones para promover el crecimiento económico», señalaron.
La ministra de Trabajo, Mara Ruiz Malec; su par de Producción, Ciencia e Innovación Tecnológica, Augusto Costa; el director ejecutivo de ARBA, Cristian Girard; y el presidente del Banco Provincia, Juan Cuattromo presentaron las medidas productivas vigentes a dirigentes de los principales gremios industriales del país.
A la reunión asistieron el titular de la UOM Nacional, Antonio Caló, acompañado por los referentes Abel Furlan y Soledad Calle. En tanto, en representación de SMATA, concurrieron los miembros de la conducción, Mario Manrique y Laura Ávalos, mientras que su secretario general, Ricardo Pignanelli, y Julián Domínguez participaron a través de videoconferencia.
En la sede del Ministerio de Trabajo, los funcionarios explicaron las acciones que integran el Programa de Recuperación Productiva 2021, que apuntan a proveer financiamiento, incentivar la transformación tecnológica y fomentar la actividad económica, luego de la situación heredada en 2019 y los efectos de la pandemia.
El plan consiste en una batería de medidas que incluye moratorias, programas de asistencia, créditos, para sostener los diferentes sectores de la economía, mantener los puestos laborales y ampliar la producción. Los referentes gremiales describieron como “inédito” este tipo de encuentros.
El secretario General de la UOM, Antonio Caló, destacó las medidas en marcha y consideró que son “acertadas”. “Esto ayuda a las pequeñas y medianas fábricas y cuando es así están ayudando también a los trabajadores”, afirmó.
Por su parte, el secretario adjunto de SMATA, Mario Manrique calificó la reunión “como satisfactoria” y manifestó el compromiso del sindicato. “Es un plan ambicioso que busca incentivar el desarrollo de inversiones para promover el crecimiento económico, y aspirar así una mejor calidad de vida en relación al empleo”, agregó.
La ministra de Trabajo, Mara Ruiz Malec, consideró que la respuesta del encuentro fue positiva y señaló que los dirigentes gremiales se “asombraron de la cantidad de políticas” que la Provincia está llevando adelante.
“Nos pareció importante intercambiar con el movimiento obrero qué es lo que estamos haciendo para que lo puedan informar a las bases, pero también, tener su visión sobre lo que puede llegar a ser importante para que la Provincia sea más productiva y genere más empleo”, expresó.
En ese sentido, Ruiz Malec agregó que se abrió un espacio de diálogo para discutir cuestiones y acciones sobre el plan productivo, el plan quinquenal de obras, y la incorporación de trabajadores al mercado laboral a lo largo de próximas reuniones.
Vale recordar que con un documento que llevaba la rubrica de más de una veintena de gremios trascendentes del sector y sus firmas, Caló y Pignanelli relanzaron el mes pasado la Confederación de Sindicatos Industriales de la República Argentina (CSIRA).
La CSIRA es esa Confederación que había sido trascendente en el último tramo de la segunda gestión de Cristina, con fuertes vínculos por la entonces ministra de Producción Débora Giorgi, y que más tarde había sido prácticamente abandonada.
Ahora, Caló y Piganelli, quienes la lideraron en aquel nacimiento, buscan reflotarla al compás de un modelo económico más amigable para la industria.
Además, la CSIRA es un pilar que los puede convertir en factores de poder en las decisiones que se vienen en materia económica y en el plano sindical, con la disputa por la renovación de la CGT todavía abierta.