Los secretos de Andrés Rodriguez
No es fácil entender la lógica con la que se mueven algunos jerarcas sindicales. El caso de Andrés “el centauro” Rodriguez es paradigmático y se vuelve una muestra palpable de los manejos personalistas que se institucionalizan. Las decisiones trascendentales de UPCN pasan única y exclusivamente por el escritorio del Centauro, que entre adiestramiento y adiestramiento de caballos suele dar las directivas.
Tanto es así que esta semana en el gremio había un total desconcierto ante el inminente cierre paritario que no incluyó consulta alguna con el resto de los popes del sindicato. La firma a las apuradas en La Rosada no le abrió el juego a nadie. La mayoría se enteró por la prensa o por funcionarios que tomaron conocimiento de los detalles del acta rubricada.
Pero no es la única situaci...