Si bien ya se sabía que habría 100 despidos, ayer le llegaron formalmente los telegramas a los trabajadores echados. La Federación Obrera Ceramista inició un paro total en el establecimiento productivo, medida que fue acompañada con un paro de cuatro horas por turno en las plantas del mismo grupo empresario ubicadas en Puerto Madryn (San Juan) y Villa Mercedes (San Luis).
La compañía justificó los despidos en base a una crisis económica, pero según los trabajadores no pudo demostrarlo a través de los expedientes administrativos. La firma es una importante multinacional del grupo Etex, con sede en Bélgica. Posee 118 plantas en 43 países.
“A pesar de las constantes inversiones que se realizaron para dilatar la discontinuación de la línea de revestimiento de pared, hoy ya no es posible mantenerlas operando debido a una baja en la demanda de este producto por una tendencia mundial de los últimos años”, informó la empresa en un comunicado. Al parecer, el problema viene desde hace tiempo porque el mercado dejó de demandar azulejos para el revestimiento de las paredes. El año pasado, la planta estuvo parada durante seis meses. En función de ese diagnóstico, la empresa decidió dar de baja la línea de producción de azulejos. De los 300 trabajadores de la planta, echó a 100.
“Los trabajadores ceramistas defenderemos nuestros puestos de trabajo frente a los que pretenden retroceder en el tiempo y condenarnos a una vida de miseria. Convocamos a toda la sociedad a resistir el ajuste que pretenden estas empresas internacionales que se han beneficiado de las familias trabajadoreas de Argentina”, dijo la Federación Obrera Ceramista. El conflicto va a continuar en el Ministerio de Trabajo. Los trabajadores reclamaron la intervención del ministro de Trabajo de la provincia de Buenos Aires, Marcelo Villegas, y del ministro nacional, Jorge Triaca.