«Hoy es el último día de producción, ya estaba establecido que hoy Paquetá cerraba sus puertas. La fábrica se radicó en 2006 en Chivilcoy. En su momento llegó a tener más de 1.500 personas trabajando, pero con la entrada de importaciones y materia prima se fue reduciendo», dijo Lorenzo Lezama, delegado gremial.
Tras el anuncio de la firma a la Unión de Trabajadores de la Industria del Calzado de la República Argentina (UTICRA), el ministerio de Trabajo bonaerense intentó establecer negociaciones para la continuidad de la planta, pero la decisión ya estaba tomada.
La crisis económica con caída de la demanda y el aumento de las importaciones de calzados viene golpeando desde hace tres años a las empresas industriales: en octubre, el sector fabril cayó 3,6% y terminará el año en recesión.
Según un informe sectorial, la importación de calzados creció un 45% en los últimos dos años, pero el sector más afectado fue el deportivo, ya que el ingreso de productos terminados o semi- terminados desde Brasil aumentó un 116% en ese período.
En la Argentina, existen alrededor de 1.500 empresas dedicadas al calzado y emplean a unas 65.000 personas que atraviesan una crítica situación por la caída del consumo y la suba de importaciones.
En los últimos meses, la crisis se reflejó en conflictos desatados en empresas de renombre en el sector: Paquetá de Chivilcoy; Dass, Gaelle y Alpargatas, con pérdidas de 2.100 fuentes laborales.
En el marco de la conciliación obligatoria, quedan trabajando en la fábrica ubicada en el Parque Industrial de Chivilcoy unas 397 empleados de los 600 que estaban en la fábrica a principios de año.
De los 600 trabajadores de Paquetá, 178 personas habían aceptado el retiro voluntario y 25 estarían interesadas en negociar una salida, pero 397 operarios quieren que la firma consiga nuevos contratos y permanezca abierta. .
«Hace dos meses éramos 800 empleados. Hoy fue el cierre total de empresa por falta de pedidos de Adidas. Paquetá tiene exclusividad para Adidas, a quien le fabricaba el calzado totalmente terminado. Cuando un Gobierno abre la importación, las primeras fábricas que caen son textil y calzado», dijo Lezama a Radio 10.