El retroceso de las ventas en ambos puntos de comercialización, supermercados y autoservicios, se profundizó y es más pronunciado en el interior del país.
La caída del consumo en supermercados y autoservicios se profundizó en junio, al retroceder un 12,5% interanual a nivel nacional, frente a la merma del 10% registrada en mayo, según reveló un relevamiento elaborado por la consultora Scentia.
La disminución en el sexto mes del año fue del 10,3% interanual en las cadenas de supermercados, mostrando una leve baja respecto a la caída de 10,5% del mes previo, y de 14,6% interanual en los autoservicios, exhibiendo un notorio salto en relación a la baja del 9,5% en mayo.
A pesar de evidenciar una desaceleración en el declive durante mayo, pasando de un descenso del 13,8% interanual en abril a la merma del 10% en el quinto mes del año, el dato de junio reflejó que el impacto de la recesión en las ventas de supermercados y autoservicios no afloja. De esta manera, la contracción general acumulada en el primer semestre del 2024 alcanza el 8,5%.
El análisis arrojó que el derrumbe en junio fue marcadamente mayor en el interior del país, al registrarse una caída del 17,2% interanual, mientras en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), el consumo se contrajo 5,1% frente al mismo mes del año pasado.
La misma tendencia se exhibió al desagregar el comportamiento de supermercados y autoservicios. En el caso de las grandes cadenas de consumo, el retroceso de la ventas fue del 9,8% interanual en el AMBA y del 10,3% a nivel nacional en junio. En lo que va del año, acumulan una disminución del 10%.
El estudio indicó que la categoría que tuvo el mayor descenso en la comercialización dentro de los supermercados fue los productos impulsivos, como por ejemplo, las golosinas, al derrumbarse un 20% contra el mismo mes del 2023. Por detrás se ubicaron las bebidas sin alcohol (-17,2%). En tanto que los rubros que menos cayeron fueron los de alimentos perecederos (-3,9%) y limpieza del hogar (-4,2%).
En los autoservicios independientes, por su parte, el contraste entre el consumo en territorio metropolitano y el resto del país fue más notorio, ya que las ventas tuvieron un repunte del 2,4% interanual en el AMBA, mientras que en el interior se desplomaron un 21,9% en junio frente al mismo mes del año pasado. En el primer semestre del 2024, arrastran un declive del 7%.
En cuanto a la dinámica que tuvo el consumo por categorías en los almacenes, fue similar a la de los supermercados. Las bebidas sin alcohol fueron el rubro que registró la caída más pronunciada con 26,7% contra junio de 2023. Le siguieron los productos impulsivos (-20,8%) y limpieza del hogar (-19,6%). En tanto que los alimentos perecederos anotaron una merma menor con -7,1%.