Con buen timing, Facundo Moyano recuerda que hace 10 años presentó un proyecto de democracia sindical en el Congreso

Facundo Moyano, tras la renuncia de su hermano Pablo a la CGT y su padre que se dispone a volver a la conducción de la central, pone otra vez sobre la mesa su proyecto de democracia sindical, ese que presentó en 2015 siendo diputado. Cuestiona la democracia indirecta, los mandatos sin límite de renovación, la dificultad de presentar listas opositoras y más.

Con un video explicativo, Facundo Moyano revivió un proyecto de ley sobre democracia sindical que presentó en la Cámara de Diputados de la Nación hace 10 años. En aquel momento, la propuesta le valió la crítica de sus propios compañeros y familiares.

Viniendo de una de las familias con más peso pesado en el mundo sindical, el secretario Adjunto del Sindicato de Trabajadores del Peaje SUTPA, hizo un camino paralelo, cercano al linaje paterno pero propio.

Su planteo se reduce a algo que ya es innegable: el sistema sindical argentino sufre una profunda crisis hace décadas porque cada vez son menos los trabajadores registrados. Facundo apunta a una reforma laboral pero también a una reforma sindical: «Creo que es necesario avanzar hacia una nueva adecuación laboral, en un proceso consciente de las nuevas tecnologías, adecuando esto a su vez a las necesidades del trabajo argentino. Si algo aprendí en estos años es que los cambios son de abajo para arriba, por eso para hablar de adecuación laboral, hay que hablar primero de democracia sindical».

Según Facundo Moyano, estos dos ejes están profundamente ligados porque más trabajo registrado implica un mercado laboral más dinámico y esto contradice a buena parte de los estatutos que alientan la no participación de los trabajadores, mientras colocan a los dirigentes en una posición de «casi monarcas». Qué hacen estos estatutos, que cuando haya una determinada lista opositora tenga que cumplir con requisitos imposibles para poder competir

«Es más fácil ser presidente de la Nación que secretario general de la mayor parte de organizaciones sindicales en la Argentina», afirmó.

Moyano remarcó que los dirigentes son electos por delegados, por lo tanto no se capacitan y se alejan de los cientos de miles de trabajadores y trabajadores que deben representar. «Los trabajadores cada vez más descreen y repudian a sus dirigentes», disparó sin piedad, pese a que Pablo, Karina, Jerónimo, Hugo hijo y Hugo padre están relacionados con el mundo sindical.

«Quienes dicen que no es el momento de dar esta discusión es porque nada quieren cambiar», aseveró.

Tras presentar su proyecto en 2015, y para fortalecer su punto, Facundo Moyano llevó a cabo esta reforma en el Sindicato Único de Trabajadores del Peaje, del que fue secretario general y ahora conduce Florencia Cañabate, con él como Adjunto. El SUTPA actualmente tiene, además de voto directo, limitación de mandato y se incluyó a un 56% de mujeres en la Comisión Directiva.

«En una organización democrática, el dirigente está obligado a ser mejor y a moverse por los trabajadores, generando un círculo virtuoso en el mundo laboral», proyectó.

La cuestión de la perpetuidad de un dirigente la considera «discutible», pero «lo que tiene que existir son condiciones para que ese dirigente sea votado con democracia, con mecanismos claros». También llamó a terminar con la afiliación compulsiva y

«Si en un país de 46 millones de habitantes hay democracia directa, cómo puede ser que en un sindicato haya democracia indirecta», reclamó.