La huelga fue definida por la Federación de Luz y Fuerza, que comanda Guillermo Moser, tras varias semanas sin conseguir recomposición salarial. Hay fuerte descontento en las bases del gremio por el sostenido deterioro salarial.
Los tiempos de esplendor de los trabajadores de Luz y Fuerza parecen haber quedado atrás. Con un deterioro sostenido del poder adquisitivo de los salarios, similar al de los empleados del sector público, el ingreso medio del sector está corroído.
En ese contexto, la Federación que lidera el chaqueño Guillermo Moser debate por estas semanas la revisión de la paritaria salarial del período 2022 – 2023.
Sin respuestas de los empresarios y con una presión cada vez más fuerte de las bases del gremio, Moser activó para este martes una huelga total por 24 horas. Amaga con ser de las primeras medidas de acción directa con contundencia desde que asumió.
Desde la Federación aclararon que, a pesar de la protesta, se mantendrán las guardias mínimas por lo que no habrá afectación del servicio para los usuarios.
El fantasma del malhumor de los trabajadores del sector ya empieza a correr y se expresa en las redes sociales. Piden iniciar el proceso para recuperar salario. Algo similar a lo que reclamaban los metalúrgicos en un camino que derivó en la caída de la conducción de Antonio Caló.
Mientras tanto la mirada está puesta en el Ministerio de Trabajo. Habrá que ver si dictan conciliación obligatoria o dejan correr el conflicto.