El jueves pasado la cúpula de la CGT de Antonio Caló realizó una reunión donde prevalecieron los gestos adustos. Además de observaciones preocupantes sobre la situación económica actual, el titular del gremio docente, Sergio Romero, leyó un informe crítico de numerosos aspectos del sistema educativo. Antes de ello, Caló lanzó críticas internas por faltazos de dirigentes gremiales.
La reunión había sido convocada por Caló mismo junto a Omar Viviani, líder del gremio de taxistas. Ante la ausencia de algunos “pesos pesados” de la CGT y la fugaz participación del referente de los “independientes”, Andrés Rodríguez de la Unión de Personal Civil de la Nación, el metalúrgico se desquitó criticando lo que lee como un ninguneo de la tropa de cara al juego político pre-electoral.
Con respecto al informe de la UDA, Romero abarcó distintos puntos en un documento titulado “Contrasentidos”. Allí criticó al gobierno la falta de cumplimiento de acuerdos salariales y de metas educativas. Uno de los mayores cuestionamientos apuntó a la exclusión de los gremios del Consejo Federal de Educación.
Con respecto a lo salarial, también se señaló el no cumplimiento del acta paritaria de este año, en la que se comprometió a elaborar un convenio colectivo para los docentes. Al primero de enero del 2015, graficó Romero, el sueldo básico del docente será menor al salario mínimo, vital y móvil.
También se advirtió sobre la heterogeneidad federal del sistema que el líder de la UDA calificó de “resabio de la década de los 90”. «Conviven en el país un sinfín de normas diferentes en cuanto a carga horaria, incompatibilidad horaria y de cargos, funciones docentes, regímenes de licencias, cantidad de alumnos por aula», leyó del documento. Y ejemplificó: «En algunas jurisdicciones el primario y secundario es de seis años cada uno, mientras que en otras es de siete y cinco”.
Finalmente, el documento propone elevar el Presupuesto Nacional destinado a Educación del actual 6% del PBI a un 8,5%, y dividirlo en dos: una caja que subvencione a la educación pública y otra para el nivel universitario. Incluso formalizó el pedido al Congreso Nacional.